Recomendaciones para evitar problemas cuando se comparten décimos

Un décimo de Lotería es un documento al portador. Si está premiado, el premio lo recibe quien tiene el boleto en su poder. Pero, ¿y si es un décimo compartido? Cuando se comparte un décimo, es suficiente con que el que lo tiene físicamente (depositario) entregue a cada participante una copia firmada (con nombre y firma del depositario) en la que se indique el nombre completo de la persona que participa y la cantidad exacta que juega. Recuerda la Unión de Consumidores de Palencia que también se podría enviar una foto del décimo por correo electrónico o 'WhatsApp', pero con los mismos datos.

Si se pierde un décimo o es robado, lo primero que hay que hacer es denunciarlo de inmediato ante la Policía Nacional o Guardia Civil del lugar donde ocurrieron los hechos, con el mayor número de pruebas con los que se pueda justificar (fotos, fotocopia del décimo…), y a la mayor brevedad hay que comunicarlo por escrito al organismo de Loterías y Apuestas del Estado. Con esta denuncia se puede paralizar el pago del premio, hasta que el juez resuelva quien es el verdadero dueño.

Otras recomendaciones que lanza la Unión de Consumidores es que las palabras se las lleva el viento y que en caso de conflicto, no sirven como prueba. «Si encargas o intercambias décimos enteros, procura recogerlos y pagarlos antes del sorteo; si se pierde el número, denuncia en la comisaría de policía y en Loterías y Apuestas del Estado; si el décimo se estropea, por ejemplo, porque se cuela en la lavadora, hay que enviarlo a la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado, que determinará si se puede cobrar el premio. Y si está muy irreconocible, será la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre la que se pronuncie. En esos casos, no intentes recomponerlo y entrégalo en un sobre de plástico; y cuidado con los ciberdelincuentes, que también están al acecho», advierte la UCE.