Palencia

El PSOE busca apoyos para unos presupuestos que no contemplan ningún incremento

No lo tienen fácil, quedó muy claro el pasado mes de diciembre con la votación de las Ordenanzas Fiscales, en la que el equipo socialista se quedó prácticamente solo en sus propuestas de subidas de impuestos y tasas. Únicamente le llegó el apoyo, y no en todos los casos, del portavoz de IU-Podemos, Rodrigo San Martín, pero que resultó insuficiente. Las matemáticas son tozudas. PSOE y la formación izquierdista solo suman once votos frente a los trece que conformaban PP, Vamos Palencia y Vox, a los que también se unía en la mayor parte de los casos el del concejal no adscrito, Ricardo Carrancio, expulsado del grupo de Vox.

Para los presupuestos todavía no está claro el reparto de fuerzas. Lo único que tiene seguro por el momento el concejal de Hacienda, Carlos Hernández, es el voto favorable de los diez ediles socialistas, el resto de apoyos tendrá que ganárselos.

La primera parte del trabajo, la de recoger en el documento las necesidades de las diferentes concejalías, así como la previsión de ingresos, ya se ha completado. El primer borrador de los presupuestos municipales para 2025 ya está completo y ha recibido el primer visto bueno de los ediles del equipo de gobierno.

Ahora falta la oposición, que tal como se encuentra ahora la situación en el Ayuntamiento de Palencia, son la totalidad del resto de los grupos políticos. Porque si al comienzo del mandato la sintonía entre el PSOE y Vamos Palencia, que prestó sus votos para la investidura de la alcaldesa, Miriam Andrés, era evidente, en este año y medio, las diferencias entre ambos partidos han ido agrandándose hasta configurar una brecha que a estas alturas parece insalvable. Vamos Palencia fue el grupo que mayor rechazo planteó a las propuestas del PSOE de cara a las Ordenanzas Fiscales y le votó todo en contra, hasta aquellas medidas que sí encontraron aceptación entre el Partido Popular e incluso en los concejales de Vox. Rechazo frontal hasta para la actualización del registro de calles.

Pero aquello fue otro debate y ahora toca recomponer afectos, si se quiere sacar adelante el proyecto de presupuestos. Arranca un nuevo periodo de negociaciones para intentar acercar posturas hacia un documento que este año nace con especiales dificultades.

Por un lado, la posibilidad de aumentar los ingresos del Ayuntamiento se ha visto notablemente frenada con la decisión de los grupos de la oposición de rechazar cualquier aumento de impuestos, así como de la mayor parte de las tasas -solo vieron finalmente el visto bueno las que se incrementaban en torno al IPC--. Al final, el único colchón que le ha quedado al equipo de gobierno es el incremento en la recaudación por el 'catastrazo', la actualización de los valores catastrales de los inmuebles, que estaban congelados desde el año 1996. Con esto, el Ayuntamiento subirá su recaudación impositiva en unos 600.000 euros, pero poco más. El resto de los tributos locales están congelados, al igual que las tasas que en mayor medida afectan a los ciudadanos, el agua, el alcantarillado o la recogida de basuras.

Y a este limitado incremento de la recaudación se le añaden otra serie de problemas para el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Palencia. Los contratos de servicios públicos aumentan sus costes con el nuevo año, otros deben sacarse de nuevo a licitación por un precio mayor, como la grúa o el transporte urbano y llega además la puntilla de tener que comenzar a devolver el crédito recibido de parte del Estado para hacer frente al pago de la sentencia de la calle Jardines. Esto supone por sí solo para este año 2025 un incremento del gasto de 2,4 millones de euros, muy por encima del aumento de la recaudación fiscal que está previsto tras la congelación de la mayor parte de las Ordenanzas Fiscales.

Y con este contexto el equipo de gobierno municipal del PSOE tiene previsto iniciar este viernes, a lo sumo el próximo lunes, la negociación del presupuesto con los grupos de la oposición. Según ha confirmado la alcaldesa, Miriam Andrés, su intención es que el documento presupuestario le sea facilitado al resto de los partidos políticos este viernes, «como muy tarde el lunes, para comenzar a negociar cuanto antes», indicó este martes la regidora palentina.

Miriam Andrés señaló que el borrador ya ha sido estudiado por los concejales del equipo de gobierno, por lo que ahora se abre un proceso de diálogo con los grupos políticos para intentar conseguir al menos los tres votos necesarios para alcanzar la mayoría absoluta.

El pasado año, el acuerdo fue posible con Vamos Palencia. La votación plenaria se llevó a cabo el 18 de enero y salió adelante con el apoyo de los diez concejales socialistas y los tres de Vamos Palencia. IU-Podemos se abstuvo y PP y Vox votaron en contra.

Pero como se ha visto en las últimas grandes votaciones plenarias, este reparto de fuerzas ya no es tan fácil que se repita. En el debate de las Ordenanzas Fiscales, el PP, Vamos Palencia y Vox dejaron muy claro su rechazo a las propuestas de subida de los socialistas. Primer aviso de ruptura. Posteriormente con la ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones, el segundo. Mientras que el PP alcanzaba un pacto con el equipo del PSOE para aprobar una normativa municipal en este ámbito de la movilidad por el centro de la ciudad, Vamos Palencia, al igual que Vox, volvía a situarse totalmente en frente de los socialistas y votaba en contra.

El pasado año el presupuesto salió adelante con una cuantía de 96'5 millones de euros, lo que suponía un incremento del 3'99% respecto a 2023.

Para este año la situación es muy diferente. La sintonía entre los socialistas y los socios de investidura se ha visto muy deteriorada en los últimos meses, con lo que conseguir su apoyo no resultará tan fácil. Y además, tampoco podrá plantearse ese incremento de casi el 4%. Al contrario, la cuantía será previsiblemente la misma o muy parecida a la de las cuentas de 2024. La propia alcaldesa lo ha confirmado y ha manifestado que el borrador del presupuesto para este año presenta un techo situado entre los 95 y los 96 millones de euros, «una cantidad muy similar a la del año anterior».