![«El problema que tiene Palencia es que está a 45 kilómetros de Valladolid»](https://s1.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/202102/20/media/imprentaPilar01.jpg)
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«Está muy complicado, y eso que esta parte de la calle parece que está un poco mejor que la zona del principio. Pero ahora al irse Zara y también Punt Roma y se está hablando de muchos más... Está muy mal, los comercios grandes ... están cerrando todos y al final todo el mundo se va a ir a Valladolid a comprar. El problema que hay en Palencia es que estamos a 45 kilómetros de Valladolid, y la gente se va», explica Avelino Pedrosa, propietario de la Imprenta El Pilar, uno de los negocios históricos de la ciudad, que se remonta al año 1929 y que se mantiene como todo un símbolo del comercio tradicional de la Calle Mayor.
Este comerciante, que ve con mucha preocupación el futuro de la principal arteria comercial, reconoce, sin embargo, que su negocio ha conseguido mantenerse a pesar de las dificultades de los últimos tiempos. «Estamos aguantando y seguiremos lo que se pueda. Superamos a Felipe González, a Mariano [Rajoy], que estuvo la cosa muy mal, y con este, pues ni lo sé, porque cada vez está más complicado», señala Avelino Pedrosa, mientras lamenta el cierre de la tienda de Inditex.
«Se notaba mucho, porque pasaba mucha gente por aquí y al final, entraban. Esa venta esporádica, de quien pasaba delante del escaparate y compraba algo subió mucho cuando llegó Zara y ahora vemos que se está perdiendo. Como sigan cerrando, nos van a hundir», explica, al tiempo que recalca que el mayor problema ha venido derivado de las ventas por Internet. «Hemos perdido gran parte de la venta a las oficinas, porque antes teníamos muchos encargos de material, y ahora todo lo compran por Internet. Y encima nos traen el Amazon a Valladolid, ya no puede ser peor», señala.
Pero a pesar de la situación, Avelino Pedrosa quiere ser optimista y no duda en manifestar sus ganas de continuar adelante con este negocio casi centenario. «Está todo muy negro, pero hay que lugar, hay que aguantar y seguir. Cada vez hay menos pedidos de las oficinas y la imprenta también ha bajado mucho, pero no nos vamos a rendir, porque hay que aguantar por los que vienen por detrás», agrega.
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