Las piscinas municipales de Palencia abrirán a mediados de junio

Las tres piscinas municipales de la capital palentina (Sotillo, San Telmo y el Monte) ya comienzan a prepararse para su apertura, que se prevé para mediados del mes de junio. «La idea es abrir las tres de manera simultánea, pero a lo mejor hay algunos días de diferencia. Depende de la puesta a punto, de si alguna tarda un poco más en llenarse o si Sanidad no puede ir a verla antes. Pero la idea es que empiecen a funcionar las tres al mismo tiempo», afirma el concejal de Deportes, Víctor Torres. «Lo ideal es que podamos cumplir con el objetivo que nos hemos propuesto, que es del 15 al 20 y las tres de manera simultánea», añade.

Mediados de junio, poco antes de las temidas o deseadas notas finales, suele ser la fecha en la que se da el pistoletazo de salida a las piscinas palentinas, aunque el año pasado se retrasó hasta el 6 de julio por la pandemia y todas las medidas de seguridad que había que cumplir para abrir.

Este año aún no se sabe si va a ser necesario el aparcelamiento del césped para garantizar la distancia entre los distintos grupos que acudan a zambullirse –en 2020 se pintaron las líneas con una máquina con un tamaño de 3,25 x 2,25 metros cada parcela–. «Nuestra idea es que no, pero hablaremos con Sanidad para ver su recomendación, aunque suponemos que este año ya no sea necesario como el anterior», argumenta Torres.

Castilla y León se encuentra desde el 21 de mayo en el nivel 3 de alerta, que correspondiente a una situación de riesgo «alto» por la covid-19, pero que permite la ampliación del aforo hasta el 50%, desde el 33% que se estaba en la fase anterior. Esta medida, que se revisará cada 14 días, se aplicará a partir de ahora por provincias. Esto quiere decir que, si los datos de Palencia con respecto al coronavirus no empeoran, de aquí a mediados de junio, habría un total de 2.215 plazas entre las tres piscinas municipales. La más grande de todas es el Sotillo, con 1.247 plazas al 50% de su capacidad, seguida del Monte (713), siendo la más pequeña de las tres San Telmo (255).

En caso de que la situación fuese mejorando y se pudiera ir bajando de niveles, se abrirían las piscinas a un aforo del 75% en el nivel 2 y del 100%, en el nivel 1. Aquí, las puertas acogerían bañistas sin límite de aforo hasta los 4.431 que cabrían entre las tres.

Los vestuarios, limitados a necesidad extrema el año pasado, podrán utilizarse en esta ocasión con aforo reducido que garantice la distancia de seguridad mínima de metro y medio. El gel seguirá estando disponible para utilizarlo y lavarse las manos, tanto a la entrada como a la salida, al igual que la mascarilla, que será un complemento más junto al bañador, la gorra o el pareo.

«La mascarilla sigue siendo obligatoria salvo en el descanso antes o después del baño, en el mismo baño y si se respeta la distancia de 1,5 metros entre no convivientes en la toalla», afirma Torres, muy satisfecho por cómo funcionaron las piscinas el año pasado. «Entendimos que teníamos que dar el servicio sobre todo porque muchos palentinos, por miedo o por la situación laboral, no iban a viajar en verano. Quisimos dar una alternativa recreativa y fue seguro. No tuvimos que acudir a la trazabilidad porque no se dio ningún contagio durante la apertura de las piscinas», advierte Torres. Estas estuvieron disponibles para todos los palentinos desde el 6 de julio hasta el 31 de agosto, que cerraron.

La trazabilidad, la posibilidad de seguir fielmente todos los contactos estrechos de un bañista –clave para frenar el contagio–, fue posible gracias a los bonos individuales, donde estaban los datos personales de cada uno y se podía conocer hasta su ubicación. «La idea que tenemos para este año es tratar de hacer un formato mixto, el que quiera cargar los bonos que los cargue y quien prefiera sacar una entrada diaria, que también pueda hacerlo. Pero tenemos que hacer alguna modificación informática para que esto se pueda llevar a cabo. La idea es que la entrada se pueda coger en la misma taquilla, pero estamos pendiente de si habría que dar los datos a la entrada», explica el edil de Deportes.

Poco a poco se va organizando todo para poder disfrutar del verano y de las piscinas. Los bares de las mismas –disponen el Sotillo y el Monte– se abrirán con las medidas que rijan ese momento la desescalada. Ahora mismo no se permite aún consumir en la barra, los interiores están al 50% y las terrazas, al 75%. El bar del Monte ya está adjudicado, pero el del Sotillo aún está pendiente de encontrar responsable.

La limpieza seguirá siendo clave un año más para mantener los espacios limpios y seguros, para evitar cualquier tipo de contagio. Por eso, las labores de limpieza y desinfección de los lugares comunes se realizarán dos veces al día, haciendo hincapié en los aseos, vestuarios, en los propios pomos, en todo lo que vaya a ser más utilizado.

Los trabajos previos a la inminente apertura consisten, sobre todo, en revisar los propios vasos y las instalaciones, porque siempre puede surgir alguna reparación –aunque, hasta el momento no ha habido nada–, después de casi un año sin utilizarse. Las piscinas se mantienen con agua durante meses, aunque no estén abiertas al público, se vacían poco antes de su puesta a punto y se vuelven a llenar para estar ya listas para el pistoletazo de salida de la temporada de baño.

«En las revisiones está todo bien, pero los problemas se ven en la puesta a puntos, sobre todo los vasos de la piscina. Los entornos ya están preparados del todo, ya se ha trabajado en ellos y ahora queda ver los vasos, si hay alguna junta con problemas o cualquier cosa que surja. La idea es comenzar a llenar las piscinas en breve», concluye el concejal de Deportes.