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Un Policía Local para a un vehículo durante un control. Manuel Brágimo

«Yo ya he pasado el coronavirus y le tenéis demasiado miedo», alega al ser sorprendido en las calles de Palencia sin justificación

La Policía Local de Palencia denuncia hasta siete personas por encontrarse en la calle sin justificación durante esta madrugada

El Norte

Palencia

Domingo, 5 de abril 2020, 19:41

La madrugada del sábado al domingo suele ser un momento de la semana en el que el trabajo de la Policía Local se intensifica. Se podría llegar a pensar que el confinamiento ha rebajado ese aumento de trabajo de los agentes, pero en este sábado ... que ha precedido a un atípico Domingo de Ramos no ha sido así. Hasta siete vecinos de Palencia han sido denunciados entre las 0:00 y las 5:00 horas por desobedecer la exigencia de permanecer en su vivienda salvo causa justificada. Cinco de ellos por caminar por la calle y dos, por circular con un vehículo

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Ahora que solo pueden salir a la calle los trabajadores que se dedican a labores esenciales, una persona que camine por la noche más tarde de las 0:00 horas es casi un sospechoso, pero más sospechosa fue aún la respuesta de un hombre que fue sorprendido en la calle Don Pelayo a la 1:13 horas por una patrulla. «Yo ya he pasado el Coronavirus y le tenéis demasiado miedo», espetó el vecino a la patrulla a la que comentó que lo único que quería era fumarse un cigarro tranquilamente. Ese cigarrito de la tranquilidad le costará al menos 600 euros al infractor, ya que la Policía, ante su respuesta, levantó la correspondiente denuncia por infracción  al Real Decreto 463/2020.

Lo que es causa justificada para el decreto y lo que es para algunos ciudadanos no se parece en nada, y se puso de manifiesto esta noche en la calle Don Miró, donde a las 5:00 horas un hombre fue denunciado tras ser sorprendido por la Policía Local. Un agente preguntó al hombre la razón por la que se encontraba en la calle a esas horas y la respuesta fue «vengo de comprar vino y Coca-Cola de la gasolinera de Suances para hacer un calimocho». El calimocho que se bebió este hombre tiene el mismo coste que el cigarrito del anterior: al menos 600 euros en concepto de una multa que tiene como objetivo obligar a la ciudadanía a permanecer en sus viviendas, aunque algunos siguen poniendo su salud, la de los demás y su economía en juego por algo tan nímio como un cigarro o una triste mezcla de Coca-Cola y vino.

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