Palencia

Palacios del Alcor se vuelve un museo

Por cuarto año consecutivo, los vecinos de Palacios del Alcor han realizado obras colaborativas tendentes a embellecer el pueblo y reconstruir o mantener el patrimonio del municipio.

El primer año se pintaron quince murales en la fachada de la antigua Casa Consistorial; el segundo se erigió el antiguo rollo jurisdiccional en estilo modernista; el año pasado se construyó el 'Camino del recuerdo', en el que se colocaron 300 baldosas con los nombres de los vecinos o personas que han formado parte de la historia del pueblo en un sinuoso camino a modo de paseo, y este verano los vecinos de Palacios del Alcor han querido ser más ambiciosos, al añadido cuatro obras que, a su juicio, son de gran envergadura.

Se trata de una escultura realizada en un estilo que fusiona el cubismo y el modernismo; un reloj de sol analemático de cuatro metros de diámetro; el antiguo batán municipal recuperado y una espectacular fuente que parece salida de un comic y en la que el agua sale por la boca de un dragón.

Dichas obras han sido diseñadas y construidas por Isaac Serna (fuente) y por Jesús María Fernández (batán, reloj de sol y escultura). Pero estos trabajos no se hubieran podido realizar sin la colaboración y ayuda de gran parte de los vecinos del pueblo, que con su trabajo y ayuda lo han hecho posible.

Las obras de mayor tamaño han sido ubicadas en una nueva plaza que el año pasado se recuperó de las ruinas, escombros y maleza y que ahora se ha convertido en un foco de reunión de los vecinos.

Todo ello ha sido financiado mediante aportaciones de los vecinos del pueblo y una parte, que no llega a la mitad del coste, por el Ayuntamiento de Astudillo.

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