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Un niño de 12 años, Juan Rebollo Ibáñez, que cursa primero de ESO en el Colegio La Salle de Palencia será investido Obispillo de Palencia este viernes, en una fiesta de origen medieval que se celebraba hacia el año 1220 en Palencia y conmemoraba la figura de San Nicolás.
Este niño, miembro de la Escolanía Niños del Coro, ha sido elegido para protagonizar esta fiesta que se celebrará en Palencia el próximo viernes 28 de diciembre. El alcalde de Palencia, Alfonso Polanco, ha subrayado el éxito de esta tradición ancestral que se recuperó en Palencia hace doce años y que cada vez tiene «más adeptos» porque «da protagonismo a los niños en estas fiestas tan entrañables».
También ha agradecido al director de la Escolanía Niños del Coro, Jesús Escudero, que además es Hijo Predilecto de la ciudad, la organización de este evento y el impulso que está dando a «esta tradición tan palentina».
Sobre el niño elegido este año como obispillo, ha explicado que es un gran aficionado al fútbol, que juega de portero en el equipo de fútbol de La Salle, y que también practica bádminton y canta, informa Efe.
Juan Rebollo será investido obispillo este viernes por la tarde en la Catedral de Palencia, en una fiesta que se remonta al año 1220, que tiene su origen en el siglo XIII, y conmemora la figura de San Nicolás, Obispo que falleció muy joven, y que al morir dejó todas sus riquezas a los niños y a los pobres. De hecho, en España durante casi siete siglos, era San Nicolás quien traía los regalos de Navidad, como aun sigue sucediendo en Alemania, Bélgica y otros países de Europa.
Sin embargo, en España en el siglo XIX los Obispos decidieron cambiar esa figura por la de los Reyes Magos de Oriente, debido a la paganización que del santo se había producido, fundamentalmente en Norteamérica, donde se había convertido en Santa Claus.
Por eso, en esa época dejó de celebrarse la fiesta del Obispillo, que Palencia recuperó hace más de una década y que en los últimos años ha retomado la tradición europea que simboliza la entrega de las riquezas de San Nicolás entre los necesitados, con el reparto de mandarinas entre los niños.
De esta forma, como ya es habitual en Palencia, la fiesta arrancará con una misa y la ceremonia de investidura del Obispillo que se celebrará en la Catedral con la participación de la Escolanía Niños del Coro.
Después, el Obispillo de este año, Juan Rebollo, recorrerá a lomos de un caballo blanco las calles de Palencia acompañado por una comitiva formada por danzantes acompañados de dulzaineros y pajes que repartirán 400 kilos de mandarinas cargados en las alfombras de los animales y caramelos que se repartirán entre los niños que contemplan la comitiva en las calles.
El recorrido, acompañado por la banda de la Cofradía del Santo Sepulcro, finalizará en el Ayuntamiento de la capital donde el Obispillo hará una serie de peticiones al alcalde en nombre de los niños, entre las que hoy ha adelantado algunas, como el arreglo de los campos de fútbol, que se recupere el Torneo de Baloncesto de Palencia y más autobuses para los colegios.
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