Palencia

El medio ambiente como nexo en la Fundación Caneja

Las obras de arte que van a protagonizar hasta seis espacios expositivos hasta el 21 de mayo miran a la naturaleza de frente, pero no desde un punto de vista bucólico o romántico, nada más lejos de la realidad. Se ennfrentan a ella desde una mirada actual, con los problemas presentes que sufre el medio ambiente. Por eso, muchos de estos proyectos reflexionan sobre la idea del jardín contemporáneo.

La línea temática de la Fundación Díaz-Caneja es el paisaje, de eso no hay duda, pero consta también de líneas trasversales como son la perspectiva de género (incluso todas las exposiciones son siempre paritarias entre los artistas), memoria histórica y diversidad funcional. Y con esta tercera temática el centro acoge este viernes una 'Jornada sobre perros de asistencia para el autismo en Castilla y León', a partir de las 18 horas.

El pistoletazo de salida de la nueva temporada resonó en las instalaciones de la fundación este jueves, donde las obras de Miguel Sbastida, María Primo, Vasco Araújo, Lara Almarcegui, José Celestino Mutis y Luc Ferrari tomaron la salida y fueron expuestas y mostradas al público palentino.

Miguel Sbastida presentó su obra 'Cartografías geobotánicas', que expresa «mis dos líneas de trabajo de los últimos años», afirmó el artista. Se trata de 'Cartografías de una expedición' y 'Jardín Colonial'. El primer proyecto está basado en la carotgrafía espacial y el desplazamiento lineal, mientras que el segundo estudia la historia taxonómica de un conjunto de plantas que han sido llamadas así en referencia a figuras históricas como militares, figuras políticas o esclesiásticas.

Uno de los ejemplos que puso el artista madrileño fue Celestino Mutis, botánico español, que tiene su propia planta llamada Mutisia Clematis. Y además este es otra de las exposiciones que puede disfrutarse en la Fundación Caneja hasta finales de mayo.

Por su parte, María Primo trabaja con sus obras para «excavar en la fotografía y sacar del olvido historias». Unas de ellas es la que se muestra en la sala 2 de la Díaz-Caneja. La artista nacida en Jerez de la Frontera narra con imágenes la historia de la gran duna de Valdevaqueros en Punta Paloma (Tarifa), lugar en el que veraneó desde niña y hace años comenzó a estudiar y a inmortalizar con su cámara. 'El Libro de Arena' narra el absurdo empeño humano en querer dominar la naturaleza.

Tras la Guerra Civil, el régimen de Franco ordenó la construcción de un sistema defensivo en el Estrecho por el que se construyeron más de 300 búnkeres y baterías costeras a lo largo de noventa kilómetros de costa. Como el flujo de arena obstruía el movimiento de la maquinaria pesada, se diseñó para detenerlo un sofisticado proyecto para fijar la duna y revegetar la zona. «Por mucho que intentes aplastarla, vuelve el viento, es como la historia de Sísifo», señala Primo, en referencia a la mitología griega y el castigo de

La duna no ha dejado de crecer y la intervención de los militares en 1939 cambió la fisonomía y el clima de la zona generando consecuencias ambientales y sociales a largo plazo que aún están por resolver.