Le juzgan por coaccionar a otro hombre que le denunció por agredirle en un club de alterne

El Juzgado de lo Penal de Palencia juzga este jueves a J. G. R., para quien el Ministerio Público solicita una pena de 18 meses de cárcel y multa de 2.400 euros por un presunto delito de obstrucción a la justicia, y una multa de 600 euros por un presunto delito leve de maltrato.

Los hechos se remontan al 26 de septiembre de 2015, cuando el acusado fue denunciado por V. V. S. por una supuesta agresión ocurrida en el club La Chimenea, en Dueñas. Esa agresión dio lugar a unas diligencias penales en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Palencia.

Encontrándose a la espera de juicio, en torno a las 3:30 horas del 27 de mayo de 2017, hallándose ambos en ese club, el acusado se dirigió a V. V. S. diciéndole, según el escrito de acusación del fiscal, que era «una mierda» por haberle denunciado, y acto seguido le dio un puñetazo en la cabeza, sin que le causara lesión.

Por su parte, J. G. R. niega los hechos de que se le acusan y que coaccionase a la víctima para que retirase la denuncia contra él por la supuesta agresión cometida en el club de alterne en septiembre de 2015.

Se clasifica como un delito de obstrucción activa a la justicia cuando un sujeto activo utiliza recursos intimidatorios o violentos para influir en el proceso judicial. Esta medida tiene la finalidad de modificar el rumbo del proceso en favor de intereses propios.

Por intimidación se entiende una conducta que se interprete lo suficientemente apropiada como para infundir el miedo en cualquier persona (por ejemplo, comunicaciones verbales o gestuales verosímiles y que influyan en el ánimo del destinatario). La violencia es el uso de la fuerza física para provocar ese cambio.

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