Un incendio junto a la antigua Balastera desata la alarma en Palencia

Se trata de una paraje muy próximo al casco urbano, prácticamente detrás de los terrenos que ocupaba el antiguo campo de La Balastera, junto al Camino de los Hoyos. Y es una zona en la que pueden encontrarse también algunas viviendas, por lo que los bomberos tuvieron que actuar con premura para que las llamas no se acercase a ninguna de estas casas.

El primer aviso llegó pasadas las 17:00 horas, advirtiendo de que un pequeño incendio se propagaba rápidamente por unos terrenos situados en el barrio de San Antonio. Las dotaciones de bomberos pronto llegaron hasta el lugar e intentaron atajar el fuego, que iba creciendo poco a poco, pero el acceso a la zona era muy complicado. El derrumbe de un talud y los numerosos escombros arrojados en la zona impedían acercarse con los camiones, por los que los bomberos tenían que tirar largos metros de manguera para contener las llamas.

Además, el viento no ayudaba, puesto que avivaba el fuego en diferentes frentes, con lo que desde el parque de bomberos de la capital se solicitó ayuda de las cuadrillas forestales de la Junta y también se requirió la presencia de una máquina excavadora de la empresa Tragsa, que pudo despejar una parte del terreno y abrir un camino de acceso para los camiones, con lo que se pudo finalmente contener el avance del fuego.

En las labores de extinción también colaboraron agentes de las fuerzas de seguridad, que una vez contenido el incendio pudieron comprobar que en la zona se encontraba una motocicleta totalmente calcinada. La Policía Nacional confirmó que este vehículo constaba como robado en los últimos días, aunque había sido ya recuperado y devuelto a su propietario. Las primeras investigaciones apuntan a que el origen del incendio se encuentra precisamente en la motocicleta, que estaba aparcada en el lugar, según se recoge en la información difundida ayer desde la Subdelegación del Gobierno en Palencia. La Policía trata ahora de determinar las causas del incendio.

Según explicaba ayer uno de los portavoces del cuerpo de bomberos, las labores de extinción, que no han llegado a afectar a ninguna edificación, se vieron complicadas por lo abrupto de la zona de acceso al terreno que se encontraba en llamas, lo que obligó a los bomberos a actuar inicialmente en dos frentes. «Los vientos han sido muy cambiantes y esto lo ha complicado todo. Cuando teníamos controlado un flanco, el otro flanco se nos iba, y hemos contado con la suerte de que el frente iba hacia el río que nos servía de barrera natural. Hemos tenido que pedir recursos a la Junta de Castilla y León para trabajar de forma conjunta y poder contener el incendio», manifestaba el sargento responsable de la operación. El bombero reconocía que había existido un cierto riesgo para algunas viviendas de la zona, aunque finalmente, el incendio había logrado controlarse dos horas después, sin que llegase a ninguna casa.

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