«El gran valor de la Catedral de Palencia son sus 1.400 años de historia, no solo sus 700»

La cita supondrá el broche de oro a la celebración del séptimo centenario de la seo, que desde el año pasado ha ofrecido numerosas propuestas culturales para «acercarla a todos los ciudadanos y poner en valor el patrimonio artístico e histórico que alberga», señala Vela, que centra su actividad profesional en la restauración de monumentos desde el despacho que fundó en 1999. Desde entonces, ha proyectado y dirigido obras como las restauraciones de las iglesias de Santa María en Fuentes de Nava o el Museo del Ferrocarril de Venta de Baños. Además, desarrolla también la labor de arquitecto-asesor de la Diócesis de Palencia en temas patrimoniales junto a su compañero Florentino Díez.

–¿Qué va a significar '¿Renacer' para la Catedral y para la ciudad?

–Precisamente, el título evoca el objetivo de la propia muestra. Se trata de relanzar la Catedral, de una puesta al día en algunos aspectos, un lanzamiento de nuevo y una apertura de puertas para los palentinos y también para los de fuera. Para que todos puedan conocer, disfrutar y enamorarse de la Catedral de Palencia.

–¿Es la mejor forma de culminar el VII centenario de la Catedral de Palencia?

–Ha sido un periodo extraño por las circunstancias que nos han rodeado, pero creo que este es un buen momento para hacerlo. El título 'Renacer' nos habla de esto, un momento en el que tanto la Catedral de Palencia como la ciudad deben ir unidos para ir juntos a este renacimiento.

–¿La promoción de este séptimo centenario ha extendido el conocimiento y valor de la Catedral?

–Sí, es innegable, pero creo que queda mucho trabajo por hacer al igual que ocurre con la promoción de la propia provincia. Tenemos que hacer todos, cada uno en la parte que nos toca, una labor de difusión porque lo que tenemos es francamente bueno.

–El objetivo para este año es llegar a las 100.000 visitas. ¿Es una cifra alcanzable?

–Eso pretendemos. La catedral suele tener anualmente 80.000 visitantes y se persigue, como mínimo, duplicar esa cifra. Tenemos que creérnoslo y, entre todos, realizar una importante labor de difusión. Hay muchos palentinos que pueden y deben venir para conocer y hacer suya la catedral, y también atraer a la gente de fuera.

–¿Qué tiene la Catedral de Palencia que no tengan otras?

–Precisamente, 1.400 años de historia. Estamos hablando de una Catedral que tiene 1.400 años de historia, no los 700 años que decimos. Estos siete siglos son de la catedral gótica, pero esta arranca en la cripta. Este es el punto más singular.

–¿Esta historia es precisamente su gran singularidad?

–Evidentemente. En todo este tiempo se han ido decantando estilos arquitectónicos y artísticos que no se dan en otras. No tenemos una catedral gótica de relumbrón como pueden ser las de Burgos o León, pero nosotros tenemos un cofre lleno de tesoros de diferentes épocas, desde el siglo VII hasta nuestros días. Ese el gran valor de la Catedral de Palencia, atesorar todas esas épocas y etapas que se pueden ver en un edificio.

–Se habla de dar a conocer los seis o siete puntos más destacables del templo. ¿Cuáles son?

–Bueno, creo que se trata de dar a conocer toda la Catedral. Precisamente, esta exposición no utiliza el templo como contenedor para la exposición, sino que utiliza la catedral para exponerse a sí misma, reforzada por los contenidos que habitualmente no están en la catedral. Se muestra la propia catedral con piezas que vienen de fuera y muchas de ellas que pertenecieron al templo en su día y ahora vuelven. Este es el punto que le diferencia de otras exposiciones.

–Después de 'Renacer', ¿se puede descansar en materia de restauración hasta otra fecha ilustre?

–Es necesario e indispensable un mantenimiento permanente de este tipo de edificios y la Catedral de Palencia no es menos. Precisamente, para esta conservación hay que tratar que haya recursos económicos para poder garantizarla.

–¿Qué supone para un arquitecto del siglo XXI como usted poder dirigir las constantes y numerosas obras de un templo de tantos siglos de historia?

–Muchísima responsabilidad, una grandísima suerte y un lujo. Profesionalmente, es maravillo poder trabajar en un ámbito así.

–¿Tanto trabajo sobre este templo le ha dejado tiempo para otros proyectos?

–Es un trabajo de equipo, de un gran equipo. Montar una exposición así no está en manos de una persona ni mucho menos. No solo ha participado nuestro estudio de arquitectura en la parte del diseño, sino que hay muchísima gente trabajando para poderlo sacar adelante. Además, tenemos previstos también diferentes trabajos vinculados al patrimonio histórico y a la Diócesis.