Los gimnasios comienzan a llenarse tras las fiestas navideñas para «quemar el turrón»

Por eso, a partir de este martes, una vez pasada la festividad de Año Nuevo, se ha podido volver a ver una de las escenas más típicas tras la Navidad, largas colas para apuntarse en los gimnasios de la capital. Ocurre todos los años, el mes de enero es el que más nuevas inscripciones recibe de todo el año, por delante incluso de septiembre.

Es el mes en el que más alumnos se apuntan y también en el que más afluencia de usuarios se registra. Algo que suele irse diluyendo conforme pasen las semanas. De hecho, muchos de ellos acaban desapuntándose durante los meses de marzo o abril tras no haber logrado adquirir una rutina y el hábito necesario.

En la capital palentina, múltiples ofertas deportivas adaptadas a los gustos y necesidades de cada uno. Desde pequeños gimnasios con máquinas de ejercicio y clases dirigidas, hasta gimnasios de mayor dimensión en el que también se ofrecen, por ejemplo, piscina y spa, o grandes naves en las que empezar a introducirse en una de las disciplinas de moda, el crossfit.

Y en todas ellas un mismo denominador común durante esta semana, muchos palentinos con ganas de comenzar 'una nueva vida' que se traduzca en la realización de deporte y ejercicio con el que quemar no solo los excesos de estas Navidades protagonizados por los turrones y mazapanes sino también ponerse en forma, ganar fuerza y perder grasa.

En el gimnasio Cronos de la capital, uno de los más veteranos de Palencia, estos días ya están pudiendo percibir este aumento de matriculaciones, aunque esperan que durante la semana que viene estas sigan aumentando ya que muchos de los estudiantes que acuden a sus instalaciones comienzan las clases.

Los jóvenes son una parte destacada de estas nuevas matriculaciones y también de los usuarios ya inscritos ya que en este gimnasio pueden conseguir créditos para los diferentes grados que se imparten en el Campus de la Yutera. Además de estos, personas de todas las edades que buscan pasar un buen rato y desconectar haciendo ejercicio.

En el caso de este gimnasio, se ofrecen también clases grupales como zumba, pilates, ciclo, tono o circuitos completos. Todo ello impartido por profesionales que tratan de personalizar los ejercicios para cada persona dependiendo mucho también de si tiene alguna lesión o limitación en algún momento.

«Ahora comienza la afluencia de nueva gente. De hecho, ahora mismo estoy realizando una matrícula», explica Iván Salán del Gimnasio Cronos, quien, desde este martes, no ha dejado de repetir este trámite. «La gente lo que quiere ahora es perder peso y para ello empiezan por las clases grupales antes que por el uso de las máquinas», agrega.

Por su parte, el gimnasio Spartan, dedicado desde su nacimiento al boxeo, actualmente está dando paso a un mayor enfoque en las máquinas de ejercicios dado que, actualmente, es lo más solicitado por los clientes. El ejercicio de fuerza ha ido ganando terreno y ahora la mayoría de los usuarios que acuden diaria o semanalmente a sus instalaciones es lo que demandan.

Cambio en el perfil

Tanto hombres como mujeres, algo que ha ido cambiando estos últimos años ya que ahora ellas se centran más en este ámbito, algo que anteriormente había estado practicado mayormente por el público masculino. Por eso, este verano, Óscar Triana, responsable del Gimnasio Spartan, decidía despedirse de una de sus señas de identidad, el ring que ocupaba toda la zona central de la nave.

Un gimnasio que su dueño define como muy familiar y que tiene un público muy fiel ya que la mayoría de los palentinos que se apuntan en él, continúan acudiendo durante años.

«Durante estos primeros días del mes de enero, el número de alumnos se puede incrementar en hasta un 20 o 25%. Son muchas las personas que quieren comenzar el año nuevo quitándose los excesos de las Navidades y el primer paso es venirse a apuntar», explica Óscar Triana, gerente del Gimnasio Spartan.

Por el torno de este centro deportivo están pasando perfiles de todo tipo, desde mucha gente joven, de quince o dieciséis años, hasta matrimonios de cincuenta o sesenta años que se apuntan juntos para hacer deporte, todos ellos lo hacen para hacer cardio, pero también para trabajar la fuerza indica Óscar Triana.

Y si se habla de fuerza en un gimnasio, hay que hacerlo también de una de las disciplinas de moda, el crossfit. También en Palencia donde cada vez son más los palentinos que se apuntan a esta técnica de entrenamiento que ha ido ganando adeptos en estos últimos años y que ya es una de las más practicadas también en la ciudad con dos centros especializados en ello. En Crossfit Palencia, capitaneado por el deportista de élite Javier Wee, saben del interés que despierta este método, algo que les ha hecho ampliar un horario desde las seis de la mañana hasta las diez de la noche de forma ininterrumpida. Una disponibilidad con la que se pretende dar servicio a la alta demanda que registra.

Quienes van a crossfit, asegura Javier Wee, lo hacen buscando hacer ejercicio y ponerse en forma, pero también poder disfrutar de, al menos, una hora de desconexión en la que el deporte sea lo único que ocupe su mente. Además, la comunidad que se forma es otra de las cosas que destaca el gerente como más positivas. «Tengo el móvil lleno de mensajes que quieren venir ya, pero es después de Reyes cuando ya comienza la gente. El número de alumnos puede aumentar desde un 15 a un 20%. Para nosotros, por ejemplo, el mes de febrero es el más potente y en el que más alumnos tenemos inscritos», aclara el propio Javier Wee.

Antes de Navidad, Crossfit Palencia contaba con doscientas veinte plazas ocupadas de las doscientas cincuenta disponibles por lo que solo los treinta primeros podrán acudir a estas clases, ya que después el cupo de las clases se verá cerrado. Cada una de estas es de unas diez personas para que cada entrenador pueda dedicar el tiempo necesario de forma personalizada. «La gente en general buscan ganar fuerza, otras quieren hacer cardio y perder los kilos ganados durante las Navidades. En cada clase dividimos por objetivos y así les agrupamos para que quien quiera hacer más cardio pueda también hacer más máquinas», sostiene Javier Wee.

Adquirir un hábito

Se tarda en adquirir un hábito al menos veintiún días, este es el tiempo clave para comenzar a hacer deporte y no abandonarlo por el camino. Los profesionales insisten en que es importante hacerlo de forma paulatina y conscientes del reto que supone para no acabar en febrero o marzo pagando la mensualidad, pero sin acudir a las instalaciones.

En cualquier caso, se recomienda comenzar poco a poco y de la mano de un profesional deportivo que pueda guiar el entrenamiento y asesorar lo que es mejor para cada uno para así evitar cualquier tipo de daño o lesión que se pueda producir ante el desconocimiento o la falta de costumbre.

Lo esencial, aseguran los expertos, es ser constante y tratar de sacar al menos una hora diaria para dedicar al ejercicio físico y autocuidado.