La gestión de los árboles como motor económico, social y turístico

Este proyecto de Bosque Modelo de Palencia se basa en las experiencias desarrolladas en otros muchos países -el primer ejemplo nace en Canadá y se presenta internacionalmente en 1992 en la Cumbre de Río-, y se marca como objetivo la gestión del paisaje y los ecosistemas, con el fin de aplicar sobre un territorio concreto medidas ambientales, económicas y sociales basadas en el desarrollo sostenible y que tienen como elemento principal el aprovechamiento de los recursos forestales.

Por el momento, en España no se ha desarrollado plenamente ninguna de estas experiencias, con lo que el Bosque Modelo de Palencia sería pionero, según destacó María Jesús Rodríguez de Sancho, directora general de Biodiversidad del Ministerio para la Transición Justa, que participó en la presentación del programa en una jornada de trabajo celebrada en la Diputación, orientada a implicar a los responsables municipales de los ayuntamientos que se incluyen en el territorio afectado.

Según explicó Pilar Valbuena, una de las técnicas responsables del proyecto, el Bosque Modelo de Palencia afectará a una superficie de 4.067 kilómetros cuadrados, es decir el 42,95% de la superficie de la provincia de Palencia, en un territorio que abarca desde del límite comarcal de la Montaña Palentina hasta el Camino de Santiago, espacio en el que figuran 92 de los 191 municipios palentinos. Esta agente de desarrollo del proyecto indicó que el Bosque Modelo es un programa a muy largo plazo, en el que ya se viene trabajando también desde hace años, puesto que la primera reunión se llevó a cabo en Saldaña en 2015, momento en el que mostraron su implicación hasta medio centenar de entidades, dado que un proyecto de estas características se configura como un foro de trabajo y participación destinado a la mejora de un territorio en el que tienen cabida todo tipo de organizaciones y personas a título particular, como instituciones, empresas, agricultores, ganaderos, asociaciones, centros de desarrollo o de turismo, escuelas rurales o emprendedores.

El objetivo de la presentación de este lunes es relanzar aquella plataforma inicial y buscar el compromiso de participación de los ayuntamientos, puesto que, tal y como destacó la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, «vosotros, alcaldes, sois los principales actores sobre el terreno».

La máxima dirigente de la institución provincial destacó la oportunidad que supone el desarrollo, puesto que conlleva la aplicación de diferentes iniciativas destinadas a la creación de empleo, el fomento de la actividad económica, mediante prácticas de desarrollo sostenible.

Armisén destacó que «el volumen de madera en la provincia se ha multiplicado por seis en los últimos cincuenta años. con un crecimiento anual cercano a los 600.000 metros cúbicos, de los que se extrae un 22%», resaltando a renglón seguido las oportunidades de negocio y desarrollo local que se abren con un mejor aprovechamiento de la masa forestal, con beneficios no solo económicos, sino también ambientales, dado que se puede trabajar en la limpieza de la biomasa que supone un grave riesgo de cara a los incendios forestales. «Debemos explotar el potencial de nuestros recursos y activar la bioeconomía, implantar una gestión forestal sostenible y aprovechar esos recursos para favorecer la biodiversidad», recalcó Armisén.

Por su parte, Pilar Valbuena insistió en que el Bosque Modelo debe entenderse como una gran red de personas y entidades que se unen y trabajan para mejorar un territorio, insistiendo que se trata de un proceso de largo plazo.

Los beneficios finales para el territorio que se plantean afectan a la protección de la diversidad y de las especies, la mitigación de los efectos del cambio climático, la mejora de los servicios de abastecimiento, la producción de materias primas, la fertilidad del suelo, la acumulación de aguas o la prevención de la erosión. Además, se esperan también beneficios desde el ámbito cultural y turístico, ya que las medidas se extienden a medidas de formación, ecoturismo y defensa del paisaje.