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Luis Guil se ha mostrado muy enfadado al término del partido por la derrota y por la forma en que se produjo. «Es un día complicado porque parece que, de todo lo trabajado durante la semana, no hacemos nada durante el primer cuarto. Llegamos a ... una 'final' y no pueden meterte casi 30 puntos en el primer cuarto. Si preparamos una cosa durante la semana, hay que intentar llevarla al partido, y más todavía en casa», señaló.
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«Luego vienen nuestras reacciones, pero se van a quedar en 'casis' si no lo hacemos desde el principio. Tenemos que salir desde el primer minuto como ante el Andorra o el Gran Canaria de hacer las cosas simples y bien. No vale de nada llorar, vamos a Lugo, que es el siguiente partido, donde si ganas tienes opciones de seguir luchando hasta final de temporada y si no, es muy complicado. Estoy acostumbrado a jugar partidos a todo o nada y este es un partido de, o ganas, o te vas a tu casa. Estos partidos no se preparan solo con ganas, se hace con mentalidad, con concentración sobre qué es importante y sobre dónde están las claves para ganar al Breogán en su casa», añadió.
«Tenemos que dejar de intentar ganar y hacerlo. Cuando vas catorce abajo, es mucho más difícil hacerlo. No es una cuestión de no querer, sino de leer lo que es más importante e interpretar el juego. El exceso de ganas te hace ir a cosas que no son tan importantes y que te terminen haciendo tiros abiertos. Hemos ido a cosas demasiado sin sentido. Las ganas, sí, pero hacerlo con un foco de concentración», concluyó.
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