Palencia

Una fiesta para disfrutar de las compras en el comercio local

Han pasado doce años desde aquella primera Showpping Night que se convirtió en toda una revolución para el comercio palentino. Desde aquel momento, todos los años, a excepción del periodo marcado por la pandemia de la covid, los empresarios locales han venido reclamando al Ayuntamiento de Palencia su implicación para volver a ofrecer en este periodo final del mes de junio una nueva edición de la fiesta nocturna de las compras.

«El mejor termómetro para medir si la Showpping Night funciona es el propio interés de los comerciantes. Y hasta ahora siempre lo piden, será por algo, será porque son conscientes de que es una buena forma de abrir la temporada de las rebajas de verano», explicó la concejala de Impulso Económico, Judith Castro, durante la inauguración del evento, que en esta ocasión se ha acercado hasta los Cuatro Cantones, un punto mucho más céntrico de los utilizados de forma habitual en el tramo final de la Calle Mayor.

En esta edición, el interés por la Showpping Night se ha visto incrementado con respecto a algunos de los últimos años, en los que la participación se había ido reduciendo. Así, se han sumado a la convocatoria ochenta establecimientos de toda la ciudad, especialmente de las calles situadas más en el centro de la capital palentina y también en el barrio de La Puebla. Se han sumado comercios, pero también numerosos establecimientos de hostelería, atraídos por la masiva presencia de personas que recorre las calles para encontrar la primera ganga de la temporada.

Porque tal y como explica la concejala de Impulso Económico el objetivo de la Showpping Night es preparar al público palentino para la llegada de las tradicionales rebajas de verano, que arrancan el 1 de julio. Y se hace con un horario prolongado de las tiendas, que se refuerza con música, espectáculos y atracciones de feria y, sobre todo, descuentos.

«Es una iniciativa muy importante y que se hace a petición del propio sector, que además conlleva mucho esfuerzo de organización. Por ello, aunque la cifra de participantes es importante, y parece que empieza a haber más interés, es necesario pedir una mayor implicación, que se sigan sumando más comercios y establecimientos de hostelería, porque recordamos algunos años, en los que había un número mucho mayor», señalaba Judith Castro, momentos antes de sumarse a uno de los bailes que dirigían los integrantes del gimnasio Cronos en los Cuatro Cantones.

Porque si algo marca la Showpping Night todos los años es la enorme cantidad de grupos de música y disc-jockeys que se distribuyen por las calles del centro de la ciudad, contratados siempre por los propios comercios o establecimientos de hostelería como reclamos para atraer a un mayor número de visitantes. Pero no solo la música ambientaba la ciudad, alfombras moradas, globos en las fachadas, banderolas, mostradores en la calle, tiradores de cerveza, actores, hinchables, malabaristas y bailarines podían también encontrarse por cualquier rincón de la capital palentina.

Así, a medida que avanzaba la tarde y la iluminación de las farolas se hacía cada vez más necesaria, la afluencia de personas era cada vez mayor y las tiendas, que en los primeros momentos apenas presentaban visitantes, poco a poco se iban llenando de compradores a la búsqueda de esos descuentos especiales con los que se abría la temporada de rebajas.

Y eran compras en el comercio local, que es quien se suma mayoritariamente al a Showpping Night, puesto que a las 20:30 horas, como todos los días, las persianas de la grandes marcas y franquicias comenzaban a bajarse, mientras que las tiendas de propietarios palentinos estiraban la tarde hasta la medianoche, convirtiendo el último viernes de junio en toda una fiesta de las compras.

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