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La Escuela de Enfermería transformará su imagen con la apertura de un acceso porticadoEl objetivo es transformar una antigua edificación de finales de los años 40 en «un edificio accesible, sostenible, seguro, eficiente y funcional», tal y como se ha señalado en infinidad de ocasiones desde la Diputación Provincial, entidad promotora del proyecto. Se trata de modernizar la ... antigua Escuela Universitaria de Enfermería Dacio Crespo para su conversión en un moderno complejo universitario, con el que además pueda dotarse al centro asociado de Palencia de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (Uned) de una sede permanente en la capital palentina.
Las obras, que arrancaron a finales del mes pasado y se prolongarán durante 18 meses, hasta el verano del próximo año, si se cumplen los plazos previstos, han podido entrar ya en un ritmo acelerado de trabajo, después de unas primeras semanas de limpieza, acondicionamiento y vaciado del edificio, en el que aún quedaba una gran cantidad de mobiliario, así como de elementos no recuperables, que se han ido acumulando en el interior del inmueble a lo largo de las décadas. De hecho, algunas de las zonas, como la última planta, hoy ya vacía por completo y despojada incluso muchos de los tabiques que separaban las diferentes estancias, se encontraba antes de la reforma atestada de muebles viejos y otros enseres, con lo que toda esta parte se utilizaba como almacén.
«Tenemos un presupuesto de 7,12 millones de euros, de los que 2,2 son colaboración de la Junta de Castilla y León. El plazo de ejecución es de 18 meses y el objetivo es la modernización de este centro educativo, que volverá a albergar la Escuela de Enfermería, pero también va a ser la sede de la Uned. Un complejo universitario que va a tener casi 4.000 metros cuadrados de superficie útil, y que va a apostar también por la eficiencia energética», explicó la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén.
Por su parte, el director del Departamento de Edificación de Acciona, Javier Ceres, mostró su confianza en que las obras podrán completarse en el plazo previsto de 18 meses, «o incluso antes».
Y aunque la obra se encuentra aún en su fase inicial, el futuro complejo universitario ya permite entrever uno de los futuros elementos esenciales del proyecto, el hueco en el que se levantará un arco de entrada, en el lateral norte (con vistas hacia las pistas deportivas, las piscinas y la calle Jardines. Hasta hace poco todo ese lateral norte se encontraba ocupado por el anejo edificio de la antigua Imprenta de la Diputación Provincial, en cuyo interior se conserva aún parte de la maquinaria. Sin embargo, en esta primera etapa de la obra se ha destruido ya parte de ese edificio de la Imprenta, concretamente dos secciones, en cuyo hueco se levantará una nueva entrada porticada, que dará acceso al complejo educativo a través de un patio, que estará ajardinado y que se plantea como un espacio de esparcimiento y encuentro para los estudiantes.
Hasta ahora se trataba de una patio cerrado y escasamente funcional, que en el nuevo edificio tendrá una importancia sustancial. Actuará como vestíbulo de acceso al centro y ofrecerá servicio como jardín y punto de encuentro. Además se convertirá en el espacio fundamental para la distribución interior por el edificio, ya que permitirá acceder a la escalinata central desde la que se llegará a todos las zonas del inmueble, pero también acogerá en sus dos extremos nuevas escaleras exteriores que facilitarán posibles procesos de evacuación, pero también un acceso rápido a las dos alas del inmueble.
Desde ese patio se podrá entrar al edificio por un nuevo volumen acristalado, que se ubicará en el centro del edificio, en donde ahora se sitúa la caja de las dos escaleras que deben demolerse para crear la nueva escalinata central. «Es una reforma sustancial. Se trata fundamentalmente de abrir una portada desde el norte, porque tenía un patio que constreñía mucho la construcción. Vamos a intentar paliar todas esas deficiencias, como los problemas de distribución, porque solo tenía un núcleo de comunicación vertical, que generaba muchos problemas, con recorridos muy largos, más allá de los permitidos. Todo esto más el mal estado que presentaban los elementos constructivos, en cuanto a acabados, carpinterías, revestimientos, solados...», explicó el responsable del Servicio de Arquitectura de la Diputación, José Antonio González, quien acompaño a la presidenta de la institución provincial, Ángeles Armisén, a una visita a las obras, junto a los responsables de la empresa Acciona, adjudicataria de los trabajos.
«Muchas de las instalaciones estaban totalmente obsoletas, por lo que planteamos un nueva distribución, pasando a que el edificio disponga de tres crujías, cambios en los tabiques, apertura en la zona norte y un nuevo núcleo de comunicación que vincule todas las alturas. Además, se construirán dos escaleras en el patio. Y en cuanto a la renovación de elementos constructivos el cambio es total, carpinterías, solados, revestimientos, falsos techos, aislamientos, siempre bajo criterios de eficiencia energética», indicó el arquitecto.
La transformación del edificio de la Escuela de Enfermería no supondrá un incremento en el número del alumnado, aunque pueda disponerse, una vez que finalicen las obras, de un espacio mucho más amplio, ya que se incorpora zonas que hasta ahora estaban anuladas, como la planta superior del inmueble o el antiguo edificio de la Imprenta de la Diputación, que se destinará a zona de despachos. En la planta superior, cuya cubierta se reformó en una anterior actuación y presenta un elegante artesonado de madera, se habilitará una gran biblioteca y habrá espacio para una zona de comedor con máquinas expendedoras.
El transformado edificio albergará la titulación de Enfermería y también la sede de la Uned. Ambos centros compartirán muchos de los servicios, y será la zona sur del edificio la que se reserve fundamentalmente para la Educación a Distancia.
Mientras, la Escuela de Enfermería mantendrá una cifra similar de alumnos, en torno a cuatrocientos, dado que no existe la posibilidad de ofrecer más plazas de prácticas a sus estudiantes. En estos momentos, la matrícula de primer curso se sitúa en un centenar de alumnos y el número de solicitantes es muy superior, pero no se puede ampliar la cifra de estudiantes, puesto que no les podrían ofrecer las prácticas formativas que son obligatorias y que en su mayor parte se realizan en el Hospital Río Carrión, que ya no puede absorber más alumnos.
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