Desfile en exclusiva para Palencia

Pero el frutero José Miguel Espinosa, el popular Miguelín no quiso venirse abajo después de aquella barbarie y continuó adelante con su mayor afición, la cría de ocas amaestradas, con el objetivo poner un especial toque de alegría a las cabalgatas de los Reyes Magos.

Porque estos animales han participado ya en desfiles por toda España, desde Almería a Madrid, sin olvidar Palencia, por supuesto. Y este año, Miguelín, que ha logrado recuperar su bandada de ocas ha decidido que únicamente participarán en la cabalgata de la capital palentina, a pesar de que ha recibido solicitudes desde otros muchos puntos de España. «Este año, después de lo que pasó en marzo, la verdad es que disponemos de muchas menos ocas que en otras ocasiones, y, además, mis hijos, que suelen hacer de pastores cuando vamos a otras ciudades, tiene problemas por el trabajo, con lo que he decidido que solo vamos a salir en Palencia, y encima las voy a dirigir yo», explicaba ayer Miguelín, mientras entrenaba en su finca.

El frutero explica además que este año ha vuelto a recibir una invitación para participar en la Cabalgata de Madrid, circunstancia que estuvo vedada durante el gobierno municipal de Manuela Carmena. «Nos han vuelto a llamar. Ahora que ha habido cambio de gobierno, nos dijeron que si queríamos ir, que lo iban a estudiar, pero yo les he dicho que no estudiasen nada, que no voy a ir, que tengo pocas ocas y que las quiero sacar en Palencia, que es mi ciudad. Porque si los palentinos no hacemos algo por nuestra tierra, no esperemos que lo vengan a hacer otros», manifestó Miguelín.

El frutero tiene previsto sacar en la cabalgata de Palencia alrededor de sesenta ocas, aunque en su finca pueden encontrarse muchas más, puesto que la bandada se acerca al centenar y medio. «El problema es que no puedo sacarlas todas. Muchas son mayores y ya no pueden desfilar y otras muchas quedaron dañadas con los golpes que las dieron cuando intentaron robarlas. Pero sesenta es una buena cantidad para Palencia y vamos a ofrecer un espectáculo muy bonito», asegura.

Miguelín explica además que este año acudirá acompañado por un grupo de pequeñas cabrillas, que desfilarán disfrazadas. «Son muy divertidas. Yo me lo paso muy bien cuando las veo por aquí por la finca, así que estoy seguro de que van a gustar mucho, especialmente a los niños. Porque van corriendo sueltas por todas parte, metiéndose entre la gente. Son muy graciosas», indica Miguelín.

El frutero tiene previsto traer este año desde Francia numerosos ejemplares jóvenes para que comiencen su adiestramiento y puedan relevar a las aves que desfilan en la actualidad. Pero además, Miguelín se siente en estos días muy orgulloso de sus propios animales, puesto que una de las ocas ha podido sacar adelante dos huevos, cuyas crías rompieron el cascarón hace ocho días. «Estoy muy contento, porque no es época de cría y las ocas no rompen el huevo hasta febrero o marzo, pero esta se ha adelantado, puso cinco y dos han logrado salir adelante. Es la primera vez que me ocurre y estoy muy contento. Son la nueva generación que voy a ir preparando y ya verás como estas dos el año que viene desfilan ya como un flecha», explicaba con sumo orgullo Miguelín el frutero.