Derrota del Zunder Palencia ante el Obradoiro en el último partido en el Pabellón

El Pabellón Municipal despedía a la ACB y lo hizo por todo lo alto. Los palentinos respondieron una vez más llenando el polideportivo, pese al día y la hora. Casi 5.000 gargantas entonaron por última vez esta temporada el himno de Palencia ,tras este año histórico para la ciudad y el club. El ambiente en el Pabellón fue inmejorable, con una gran presencia de la afición gallega en las gradas, al estar jugándose la permanencia. Pasecniks recibió el premio Urko Otegui antes del salto inicial y se llevó una sonora ovación como reconocimiento a su gran temporada en Palencia. Con el balón en juego, comenzó mejor Obradoiro, con un primer parcial de 2-10. Los de Luis Guil lograron entrar en el partido a golpe de triple, con un Hands muy acertado, hasta colocarse por delante. Los visitantes apretaron en los últimos compases y terminaron el primer cuarto con ventaja en el marcador, al no valer el último tiro de Frankamp sobre la bocina (17-19).

El inicio del segundo cuarto se retrasó por culpa de un apagón en el marcador frontal de una de las canastas. Una vez arreglado, el Zunder comenzó mejor con un primer parcial de 5-0. Una buena bandeja de Agus Ubal tras un contragolpe obligó a Moncho Rodríguez a parar el partido (27-24). La presión del descenso jugó en contra de los gallegos y sus porcentajes de tiro fueron muy bajos durante toda la primera mitad. El equipo de Guil aprovechó la situación para ampliar su renta y situarse con siete puntos de ventaja. Una última falta casi bajo la bocina permitió al Obradoiro recortar en dos puntos esa diferencia antes de pasar por vestuarios (38-33).

El Zunder aprovechó el descanso para realizar la foto de equipo, con todas sus categorías inferiores posando junto al primer equipo. El cuadro palentino regresó a la pista con un Piñeiro entonado, y, junto a Pasecniks, lograron ampliar la renta morada. Sin embargo, Dotson y Howard lograron encontrar el acierto en el triple para poner en problemas al Zunder e incluso colocarse por delante gracias a una bandeja de Blazevic (45-46). Fue entonces cuando el trío arbitral comenzó a hacer de las suyas, con varias acciones polémicas y una técnica sobre Luis Guil. Aunque, finalmente, Frankamp arregló el desmadre sobre la pista con un tres más uno y Scrubbs,desde la personal, cerró el tercer asalto con 57-55.

Los de Luis Guil lograron repetir en el arranque del último cuarto como protagonistas de la fiesta y llevar la voz cantante sobre el juego. Piñeiro logró anotar en sus dos primeras acciones para colocar seis arriba al Zunder. Pero apareció entonces la figura de Dotson, y su acierto, junto a la falta de gasolina entre los palentinos, terminó siendo decisivo. Los errores del conjunto morado desde la línea de personal pusieron en bandeja al Obradoiro el triunfo y los de Moncho Fernández no desaprovecharon la oportunidad. Howard desde el tiro libre sentenció el triunfo para los gallegos, que finalmente se cerró por 75-81.

Los jugadores del Zunder se llevaron una última gran ovación de la afición palentina, junto a un vídeo de agradecimiento, tras una temporada para el recuerdo. Jugadores y cuerpo técnico portaron una gran pancarta para agradecer el cariño y apoyo mostrado durante toda la temporada. Lágrimas y orgullo entre mayores y pequeños en un público rendido al grito de '¡Volveremos a la ACB!'.