El convento de San Francisco de Paredes avanza hacia el Centro de Artes Escénicas

Un pueblo de gran tradición literaria y de unos 1.800 habitantes avanza sin descanso para contar con un teatro, construido sobre su propio patrimonio derruido, de 400 butacas (300 en el patio y 100 en los palcos), que, en principio, estará terminado para el mes de junio.

Esta rehabilitación, que asciende a 2,5 millones, se está llevando a cabo gracias al programa del 1'5% Cultural del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que apuesta por conservar y promover el patrimonio histórico, cultural y artístico de los pueblos de España y de los bienes que lo integran. También cuenta con la ayuda económica del propio Ayuntamiento de Paredes, la Diputación de Palencia y la Junta de Castilla y León.

Los representantes de las instituciones han programado una visita para comprobar de primera mano mañana lunes, 27 de marzo, lo avanzadas que están las obras de este Centro de Artes Escénicas de la localidad paredeña, que mantendrá el estilo y el encanto de la edificación original dotándola de un nuevo sentido y significado.

La bodega del convento, que durante la Guerra Civil se utilizó para llevar allí a los presos que iban a ser fusilados, está completamente rehabilitada, después de haber logrado secar y sanear toda la humedad del habitáculo con una chimenea que llega hasta el exterior, un pozo con un sistema de bombeo y también la mezcla de cal con la arcilla. Esta amplia y alargada sala está ya preparada para albergar distintas presentaciones, eventos o actividades.

La planta más alta del convento, la que albergó en su día las casas de los maestros, será un albergue para actores, que contará con dos habitaciones con literas y otras dos individuales, además de unas salas para los artistas. Servirá de zona de descanso y estudio de las compañías que se desplacen hasta las futuras tablas de Paredes para actuar allí. Esta reforma se está llevando a cabo gracias al Programa Mixto de Formación y Empleo de la Junta de Castilla y León en albañilería y restauración, que cuenta con diez operarios durante nueve meses.

Y entre la bodega y el futuro albergue, continúan las obras de la antigua iglesia del convento franciscano, que comenzaron a finales de 2020, con el proyecto de la arquitecta Pilar Díez y mediante la empresa palentina Valuarte Conservación de Patrimonio, y que estarán concluidas a finales de primavera. Se va a conservar la zona de la cripta de los Manrique y el ábside, dando valor y cuidando el patrimonio. Además, las antiguas capillas laterales se convertirán en palcos con acceso directo desde la sala y con vistas al escenario.

El pavimento original del siglo XV decorado con cantos rodados se encontró enterrado a medio metro en una capilla lateral, donde se va a situar el ascensor del teatro. El descubrimiento fue cuidadosamente extraído (como si de un mosaico se tratase) para decorar la entrada del nuevo Centro de Artes Escénicas y dar aún más belleza a esta reforma que estará concluida en pocos meses.