El colegio Juan Mena, unido y abierto al barrio del Cristo

Se trata de un centro que conserva una estructura poco funcional en cuanto está compuesto por seis edificios. Tiene un bloque de entrada, con despachos, sala de profesores, sala de reuniones, la conserjería y otras estancias. Un segundo bloque de alumnos, con un aula de usos múltiples y el gimnasio. Otro tercero, también con aulas y otras estancias. El cuarto corresponde a la biblioteca, el comedor, la sala de informática, sala de experiencias educativas y otra sala de talleres.

Las clases de psicomotricidad, el aula de música y la de inglés se ubican en el quinto bloque. Y el último está pensado para la atención a la diversidad con dos aulas de compensatoria, dos de pedagogía terapéutica y una de audición y lenguaje.

Además, el colegio cuenta con dos patios independientes, uno para uso exclusivo de los más pequeños de Infantil y el otro, para el alumnado de Primaria.

El reparto de las estancias en estos bloques complica ligeramente la tarea de coordinación del equipo directivo y de profesores, pero por contra, muestran con entusiasmo lo renovado que está el centro, la luminosidad que rezuma, la amplitud de espacios y el buen equipamiento de que dispone, entre otras bondades. Y cómo no, las vistas siempre eternas al Cristo del Otero que les protege, y por el otro lado, la situación privilegiada que ocupa, dominando la ciudad.

Además, recientemente se han ejecutado varias mejoras, entre ellas la de la calefacción, con un nuevo concepto de circuitos vistos, que han dotado al colegio de una instalación de calefacción moderna e inteligente, al introducir nuevos sistemas de control y gestión de la temperatura en cada aula, lo que va permite mejorar el nivel de confort térmico, y un ahorro importante. También se ha reformado la instalación eléctrica del centro para adaptarla a las nuevas necesidades del aula en materia de nuevas tecnologías y nuevas normativas en materia de seguridad industrial.

Desde luego, la plantilla, compuesta por 19 profesores, no puede estar más satisfecha del centro que quieren lucir, porque consideran que no es suficientemente conocido. Trabajan con el concepto de que es una escuela abierta al medio, al barrio, a la ciudad, coordinando proyectos con asociaciones de fuera del ámbito del centro, y promoviendo dinámicas internas como motor de cambio hacia conductas más sanas, saludables y de cuidado del medio ambiente. La autogestión de los residuos, la creación de espacios verdes, la resolución de los conflictos a través de mediadores son un ejemplo.