Un clásico que crece

Los creps son un popular plato de origen francés, que se han convertido desde 1995 en un clásico dentro de la oferta gastronómica palentina gracias a Don Creps.

Hace ya 25 años que este restaurante apostó por un producto innovador y muy adecuado para comidas informales. Después de un cuarto de siglo entre los palentinos, Don Creps ha cambiado de dirección para ofrecer un mejor servicio.

Los mejores creps de Palencia pueden degustarse ahora en la calle Clara Campoamor, en un establecimiento de aire colonial, acogedor y amplio, donde siguen atendiendo a sus clientes de siempre. «Después de 25 años en la Plaza de la Constitución decidimos trasladarnos. La pandemia limitó los aforos y obligó a que la distancia entre comensales fuera mayor, así que pensamos en buscar un local más amplio, que nos permita también ampliar nuestros servicios. Desde que estamos aquí, abrimos también a la hora de la comida, de 13 a 16 horas, y hemos ampliado nuestra carta con más variedad de creps, ensaladas y tartas caseras», explica Julián Villalba, gerente de Don Creps.

El resto de novedades de esta nueva etapa pueden verse en su carta. Además de las ensaladas y los tan populares creps, el restaurante amplía su oferta gastronómica. «Hemos querido ampliar nuestra oferta con otro tipo de platos, cosas para picar y tartas caseras», apunta Julián.

«Nuestro interés, además, es adaptarnos a las necesidades y los gustos de nuestros clientes, así que adaptamos nuestros platos a todo tipo de intolerancias, alergias y opciones gastronómicas. Preparamos creps para celiacos, para intolerantes a la lactosa y también tenemos la posibilidad de adecuar nuestros menús para comensales vegetarianos. Tan solo es necesario avisarnos con antelación», insiste el cocinero.

El nuevo Don Creps cuenta con dos zonas de comedor, además de una amplia terraza exterior donde disfrutar de las novedades gastronómicas que ofrece y de otros clásicos de su carta como los creps de gratinado de carrillera, de puerro y espinacas, de queso con mermelada de pimiento, de salmón con huevo y gambas o de carne picada con bacon y picante. Además de las dulces de chocolate blanco y negro de fresas, todos ellos, protagonistas de la carta.

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