

Secciones
Servicios
Destacamos
Un proyecto empresarial y agrícola que afecta a la comarca de la Valdavia, en la provincia de Palencia, ha levantado la voz de los ecologistas ... . Y no de cualquier forma. Sus intenciones están claras, paralizar la iniciativa porque afectaría «gravemente a la zona, al medio ambiente y a sus ciudadanos». Se trata de la instalación de una granja porcina con una producción de 150.000 lechones al año, según apuntaron ayer los responsables de la plataforma Valdavia Viva, constituida para luchar contra proyectos de este tipo. «Es una granja de más de 3.700 cerdas madres. Esto se quiere llevar a cabo en la parcela número 30 del polígono 6 del Ayuntamiento de Castrillo de Villavega. Solo tratamos de informar de esta actividad porque el Ayuntamiento ha ocultado qué iba a hacer, por lo que sospechamos que cuando se oculta la verdad algo tiene que ser malo», apuntó el representante de Valdavia Viva Pablo García.
Para esta plataforma surgida de 'Tú haces comarca', el mayor problema reside en el impacto medio ambiental y en su ecosistema. «Según los cálculos tendríamos más de 17 millones de litros de purines que en kilos de nitrógeno, metales pesados y otros condimentos tóxicos de los piensos se alcanzarían los 51.000 kilos al año de basura esparcidos por el territorio y que acabarían con el río Valdavia», continuó García, que lamentó que los promotores solo informaran de los aspectos positivos. «Solo conocemos las noticias buenas como los 15 los puestos de trabajo, aunque por la experiencia de otras granjas del estilo serían de dos o tres trabajadores y nunca serían de la localidad. Serán de mano de obra barata. Estas granjas están supertecnificadas y se controlan con sistemas informáticos», prosiguió.
Después de las críticas, el diputado de zona Adolfo Palacios salió en defensa tras las acusaciones de la plataforma Valdavia Viva. «Si son tan inteligentes que nos expliquen qué tenemos que hacer para luchar contra la despoblación. Si traen fábricas de tornillos, nosotros encantados. Somos una comarca agrícola y ganadera. Tenemos vacas, ovejas, cerdos y todas explotaciones tienen una normativa medioambiental que viene de Europa, España y Castilla y León, que marca todos los condicionantes», explicó el actual alcalde de Saldaña, que aseguró que el proyecto no existe aún. «Solo hay una propuesta por parte de una empresa fuerte de Castilla y León, afincada en Burgos, y dedicada a este sector que quiere hacer un desarrollo para tener en propiedad un porcentaje de los cerdos que sacrifican. Les vendría bien tener esa instalación en un radio de 100 kilómetros. Como diputado de zona se lo he expuesto a los ayuntamientos y hay uno que se ha mostrado interesado, Castrillo de Villavega. No hay nada. Ni se sabe qué se va a hacer. La gente que vive allí sí que quiere que se generen 15 puestos de empleos», continuó.
Esta granja, para Adolfo Palacios, sería una buena oportunidad empresarial para la provincia. «No es una desgracia para la zona. Son inversiones muy grandes. Cualquier empresario suele optimizar los costes. Si van a traer el pienso desde Barcelona, les saldrá más caro que si lo compran en la fábrica que ha instalado Agropal en Villoldo. Tendremos conductores que lo transporten, habrá gasolinera que vendan combustible y se facturará aquí el cereal...», afirmó contrariado Palacios, que no ve ningún riesgo medioambiental. «Que se hable de unidades porcinas o de contaminación, no lo entiendo. Los acuíferos se contaminan cuando tienes una carga muy densa como en Lérida o en puntos concretos de Segovia. El desconocimiento es enorme», concluyó el diputado de zona.
La oferta laboral, uno de los argumentos ofrecidos por los promotores de la idea, es para Valdavia Viva un bulo, pues también afectaría a la despoblación. «Este proyecto político no ofrecerá puestos de trabajos. Estas granjas no compran los piensos aquí, ni venden la carne aquí. Aquí solo dejan los purines, es decir, la mierda. Localidades como estas, en tres años, han perdido el 30% de la población. Los concejales y diputados se creen que esto es bueno para dar puestos de trabajo y se equivocan. Solo se repueblan los cerdos», analizó García, que sospecha de que esta proyecto no será el único que se implante en el norte de la provincia. «Esta será la primera de una de las granjas que se instalará en el valle de la Valdavia, después se proyectará la de Mantinos con 7.300 cerdos de engorde. Seguramente veremos otras tantas», continuó.
Y a partir de denunciar ante la sociedad este proyecto de ganadería intensiva, Valdavia Viva está dispuesta a llegar hasta los tribunales para paralizar el proyecto. «Hay alguna posibilidad para frenar esta idea porque no han cumplido los plazos. Sabemos que por defecto de forma se puede paralizar. Estamos a expensas de lo que decidan nuestros abogados», afirmó tajantemente García.
Una de las esperanzas para la plataforma radica en la parcela en la que se instalaría la granja, pues el Bocyl del 19 de junio aprobó definitivamente las normas urbanísticas municipales de la localidad, en la que el terreno afectado pasó de ser suelo forestal a rústico, posibilitando que la idea de la granja empezara a tener forma. Esta aprobación se hizo después de que el Ayuntamiento de Castrillo de Villavega (ayer su alcalde rehusó hacer declaraciones) encargara a la empresa Egain,S.A. un informe para explicar los detalles con el objetivo de «mejorar las condiciones económicas de la zona y facilitar el uso agrícola prioritario en el entorno».
Un documento que se presentó para modificar los parámetros urbanísticos que «afectan negativamente a la implantación en Castrillo de Villavega de futuras industrias e inversiones, en concreto dos: una explotación cárnica de gran volumen y un taller de carpintería». Este último ya va teniendo forma y de la empresa cárnica, presumiblemente esta explotación porcina, aún no se atisba ningún elemento. De esta forma, se eliminó la protección forestal sobre la parcela y la limitación a 2.000 metros cuadrados de superficie máxima de las naves agropecuarias a construir. «Lo han hecho en silencio y sin exponer los documentos que se han ido aprobando. En el momento que tengamos el proyecto, lo estudiaremos y ya tenemos a los abogados para impedir que esta granja salga adelante.», concluyó Pablo García.
Este terreno era una parcela de chopos, que se talaron y se extrajeron los tocones para tal finalidad. «Vamos a estar para que estas cosas no lleguen hasta el final. Pido a los políticos que lo que tienen que hacer es ejercicio de transparencia, porque es lo que prometen», afirmó Rafael Garrachón, que acompañó a García en la comparecencia de prensa.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Santander, capital de tejedoras
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.