El campus de Palencia instala un puntero invernadero de seguridad biológica

Bajo una cubierta de vidrio compartimentada, que ya está funcionando, permitirá la recreación artificial de las nuevas condiciones en que se desarrollarán los bosques y cultivos bajo la influencia del cambio climático. Cada uno de los módulos va equipado con ventilación cenital, sombreo exterior, refrigeración por 'cooling- system' y calefacción. Todos los módulos están dotados de varias mesas de cultivo de las que dos se usarán como germinadores para el crecimiento de especies forestales. Está dotado de sistema de riego y nebulización y permitirá la recreación artificial de las nuevas condiciones en que se desarrollarán los bosques y cultivos bajo la influencia del cambio climático y las nuevas especies invasivas recientemente introducidas.

«Nada tiene que envidiar a ningún invernadero de Europa. Tiene una tecnología puntera y va a permitir dar un salto cuantitativo y cualitativo en materia de investigación en un aspecto fundamental para la Comunidad como es la agricultura«, explicó la consejera de Educación, Rocío Lucas, que ha inaugurado el invernadero junto al rector de la UVA, Antonio Largo, a la vez que ha anunciado una inversión de 2,5 millones de euros para avanzar en infraestructuras científico-tecnológicas a través del programa Infrared.

El proyecto, con una inversión de 360.000 euros, se llevó a cabo con financiación de la red Infrared en Castilla y León, cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) en 2022.

Por su parte, el rector de la Universidad de Valladolid, Antonio Largo, ha recalcado que este invernadero constituye un laboratorio equipado para estudiar las condiciones físicas y químicas en las que se desarrollan las plantas ante las futuras condiciones del cambio climático, y está preparado con un intercambiador de calor para poder climatizar con precisión los ensayos a realizar en un futuro, así como un regulador de humedad y automatizado para el control climático. Además, el dispositivo cuenta con una unidad de producción de CO2, para poder simular futuros escenarios en los que se encontrarán los bosques en un futuro no muy lejano. «Nos podremos anticipar a los efectos que tendrá el cambio climático en diferentes especies», remarcó Largo.