El Becerril escapa de la crisis con un final para el recuerdo

Si de algo fue sobrado el equipo de Francis Olea fue de fe para escapar de una emboscada en la que nada parecía ir según lo previsto ante un Briviesca que cuajó una notable actuación pese a estar instalado en la parte baja de la tabla.

Dieron el primer susto los atacantes morados mediante un exquisito pase de Conde que dejó solo ante el portero a Bonalde en un fuera de juego milimétrico. También generó peligro el conjunto dirigido por Pechu con un saque de esquina que cabeceó Lucio y resolvió Sevi en dos tiempos. Trató, en todo caso, de mantener la posesión el conjunto local sin perder su dibujo sobre el terreno de juego. Un armazón defensivo que el Becerril solo consiguió deshacer con un centro de Toquero que despejó la zaga rival justo antes de que Blanco mandase su volea por encima del travesaño.

Balas de fogueo que se perdieron pronto en la memoria cuando Malick anotó uno de los goles de la jornada. Arrancó la acción Carlos Ruiz desde la medular con un pase en profundidad sobre el interior gambiano, quien aprovechó su velocidad para un autopase al primer toque con el que burló la marca de Diego y se perfiló para una segunda caricia al balón con la que esquivó la salida de Sevi.

Se estiró el Becerril en la reanudación pisando el área contraria con asiduidad, pero sin generar opciones claras de empate. Un panorama nada alentador que dio un giro de 180º en la siguiente página del guión. Conde mandó un centro al área sin aparente peligro que Mikel se encargó de convertir en las tablas con un cabezazo. Sin dar tiempo al Briviesca para encajar el golpe, Diego volvió a mandar la pelota al área rival sobre la carrera de David, quien porfió con Marcos hasta sacar petróleo en una entrada del defensor burgalés. Del resto se encargó Fabián con un toque raso en la ejecución del penalti.