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Quedan solo tres semanas para Navidad, el momento perfecto para comenzar a celebrar las tan tradicionales comidas y cenas de empresa que durante estos días proliferan. Las reservas no dejan de sucederse, sobre todo, para asegurar una mesa durante alguno de estos fines de semana. ... Como venía ocurriendo durante años anteriores, estas reuniones cada vez se adelantan más. Mientras que hace un tiempo se concentraban durante el fin de semana anterior a Nochebuena y Navidad, ahora se llevan a cabo hasta más de un mes antes. Además, hay quien también opta por esperar a la vuelta de vacaciones y hacerlas en enero.
Opciones para todos los gustos y para todo tipo de público, ya que las comidas son cada vez más sobre las cenas, que predominaban hace unos años. El objetivo es el mismo, poder juntarse por Navidad y compartir un tiempo distendido fuera de la oficina. Todo ello, disfrutando de la mejor gastronomía y el maridaje del mejor vino. «Las primeras reservas las recibimos a finales de octubre y ya tengo el comedor lleno para todo el puente de diciembre y, después, durante todos los fines de semana. Sólo queda algún hueco entre semana», señala Javier Mellado, responsable del restaurante El Perejil de la capital, donde ya cuentan con mesas reservadas conformadas por grupos de más de 30 personas.
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Ahora mismo, encontrar una mesa en los restaurantes palentinos es prácticamente misión imposible. Situación que se complica cuando los grupos son mayores 10 o 15 personas, ya que entonces se hace necesario poder reservar con varias semanas de antelación. Los grupos más reducidos y pequeños todavía pueden tener alguna posibilidad, aunque cada día que pasa es menos probable.
Para ello, todos los restaurantes llevan meses trabajando en un menú especial de Navidad cerrado que ofrezca los productos más típicos de estas fechas además de alimentos de proximidad entre los que triunfa el lechazo, aunque cada vez es más habitual optar por comidas con otro tipo de alimentos. «Las mesas de menos de 10 personas pueden pedir a carta, pero cuando son más ofrecemos diferentes menús cerrados. Todos ellos cuentan con entrantes y, después, carne o pescado a elegir. En caso de ser lechazo, el precio es superior», destaca Mellado, quien se muestra contento con las previsiones más próximas.
También en el centro de la capital, en el restaurante Don Jamón, el teléfono no deja de sonar para reservar en las próximas fechas. En este establecimiento constatan el aumento de las comidas frente a las cenas, sobre todo en días laborables. Los fines de semana, las reservas se igualan en ambos horarios. Las preferencias son diversas, para lo que la cocina ha preparado diferentes menús con precios que oscilan entre los 40 y los 53 euros. Entre los productos, alimentos de la huerta, carne y pescado. Lo que más gusta a la gente en esta época, pero también siempre alguna sorpresa con la que sorprender al paladar.
Julián Villalba, responsable de Don Creps, asegura que llevan trabajando a pleno rendimiento desde hace días, cuando se empezaron a suceder las reservas, sobre todo, para grupos mayoritarios. «Tengo reservas prácticamente para todo el mes ya que la gente en Navidad reserva con mucha antelación para evitar quedarse sin mesa luego. Por las dimensiones de mi local trabajo con grupos de un máximo de 12 personas». En cuanto a los menús, especializados en crepes, en el establecimiento han elaborado menús especiales para estas Navidades. «Hacemos lo que el cliente quiera, a la carta prácticamente. Si quieren algo fuera del tema de crepes, también se hace. Nos adaptamos a lo que el cliente quiera».
Por su parte, Roberto Espeso, del restaurante Gallery, lleva recibiendo reservas desde septiembre, aunque estas se han intensificado especialmente durante octubre, cuando las llamadas ya fueron continuas. Para estas fechas, además, Gallery habilita la opción de comidas que durante el resto del año no se ofrecen, lo que también sirve a los palentinos como atractivo para acudir durante estos días.
«Tenemos un local no muy grande y damos todo lo que podemos. No hacemos grandes cambios en los menús, le damos una vuelta e intentamos hacer un menú de precio cerrado en el que se incluye todo», explica Espeso, quien señala que también han tratado de hacer un menú 'anticrisis' de 35 euros para tratar de atraer más público.
El hostelero destaca la preocupación de muchos clientes por los precios, ya que al precio de la cena luego hay que sumar el de las copas que vienen siempre a continuación. Sobre la singularidad de estas fechas, «hay que hacer algún cambio muchas veces porque vienen más de los previstos», agrega Espeso quien también indica que la mayoría de su clientela es muy fiel y repite año tras año.
Además, en su caso, también hay gente que ha optado por pasar estas citas al mes de enero ya que la mayoría de las fechas están cogidas y esto sirve también para que negocios como este sobrelleven mejor la cuesta de enero, uno de los meses más duros tradicionalmente para este sector tras la celebración de las fiestas.
«Diciembre el mes más completo del año, nos viene mucho trabajo y nos exige al máximo, pero esperamos una gran campaña para poder encarar el invierno que es más achuchado. Queremos acabar el año bien y empezar también bien», recalca Espeso.
En el caso del restaurante Terra, los menús no son diseñados de forma especial para Navidad, sino que son los mismos de los que se puede disfrutar el resto de la época invernal a excepción de los días 25, 1 y 6 cuando sí que son completamente diferentes. «Intentamos trabajar siempre con producto de temporada, aunque para estos días tan señalados traemos un producto más exclusivo», afirma Roberto Terradillos, responsable del restaurante Terra. Productos como gamba roja, nécora o algún pescado más especial como salmonete o lubina que suponen un atractivo más para el comensal que decide reservar en Terra. «También tenemos una línea de cocina muy marcada por el producto de Palencia y por productos del entorno, por lo que estos días como que le damos un poco más de rienda suelta» sostiene Terradillos.
«Hasta Reyes, las comidas y los sábados lo tenemos ya bastante completo. Hemos notado que se han adelantado bastante para evitar también la avalancha que se da los últimos días», apunta.
Roberto Terradillos destaca que desde hace tres años es necesario aportar una señal por comensal cuando se reserva una mesa de más de 10 personas. Una medida que estableció después de sufrir cancelaciones que le hicieron tener pérdidas económicas muy importante. Para asegurar la buena utilización de los alimentos, Terradillos optó por esta medida para evitar quedarse 'tirado' con una mesa como le había llegado a ocurrir. Roberto Terradillos defiende que la hostelería debe protegerse y defenderse frente a estas prácticas cada vez más habituales también en Palencia. «Si quieres ir al fútbol o al teatro tienes que pagar la entrada antes. El sector hostelero también tiene que mentalizarse de eso», concluye.
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