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Un sumidero demasiado pequeño para un aguacero demasiado fuerte. Esa es la explicación que los técnicos municipales han ofrecido al problema que se vivió en ... la tarde de este pasado miércoles, cuando una tormenta de granizo provocó una pequeña inundación en la calle Burgos, que terminó anegando una de las tiendas de la zona.
Se da la circunstancia de que se trata de una de las calles que se han incluido en el proceso de semipeatonalización de la zona centro, por lo que la calzada se ha elevado al mismo nivel de las aceras. En este sentido, el concejal de Urbanismo, Álvaro Bilbao, ha recordado que se trata de una zona todavía en obras, puesto que los trabajos están prácticamente acabados, pero aún no han sido recepcionados por el Ayuntamiento y se están corrigiendo defectos.
Y entre esos aspectos que hay que corregir se encuentra el achique de las aguas pluviales, puesto que se pudo comprobar este miércoles que el sistema de drenaje que existía hasta ese momento era insuficiente para asumir el volumen de agua de una gran tormenta (10 litros por metro cuadrado en 20 minutos y con granizo), en una calle en la que la calzada se ha elevado al mismo nivel de la acera.
Bilbao ha explicado que precisamente la acera no se ha modificado, por lo que los técnicos de Urbanismo han reafirmado que tiene la pendiente correcta, pero sí han detectado que el sumidero era insuficiente y en la mañana de este jueves se trabajaba ya en la ampliación para evitar que se produzca una situación semejante.
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