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Elena Fañanas Valdés lleva a un usuario a tomar café.
Un servicio al alcance de todos los cerrateños

Un servicio al alcance de todos los cerrateños

Elena Fañanas, de Eurotaxi Baltanás, ofrece un nuevo servicio de transporte adaptado a las necesidades de los vecinos de la comarca

luis antonio curiel

Domingo, 26 de marzo 2017, 12:37

Apostar por el medio rural parece que es ir contracorriente, más aún cuando la sangría de la despoblación acusa a la mayoría de los pueblos de la provincia. Sin embargo, hay gente que sigue creyendo que el medio rural tiene vida y futuro. Es el caso de Elena Fañanas Valdés, que desde hace unos meses ha puesto en marcha Eurotaxi Baltanás, un vehículo adaptado para discapacitados que ofrece sus servicios por toda la comarca cerrateña.

Esta madrileña se afincó desde pequeña en Palencia por motivos laborales y ahora se considera una cerrateña más. Ha trabajado durante varios años en la línea regular de transporte, primero en los servicios urbanos de la capital y posteriormente en el Cerrato. Precisamente fue aquí donde se planteó la idea de montar su propio negocio. «Recuerdo que la gente se quejaba de los recortes en el transporte y las malas combinaciones que había para llegar a tiempo al médico o a realizar otras gestiones a la capital, por lo que me planteé ofrecer este servicio en la comarca. Y hoy es ya una realidad», comenta Elena Fañanas. «Para mí ha sido un cambio, pues me he asentado en el medio rural y estoy encantada. Tengo la parada en Baltanás y vivo en Hornillos de Cerrato, donde ya tengo hasta un huerto. Es otro estilo de vida, muy recomendable. Es como el mundo al revés y aquí parece que el tiempo pasa más despacio y se saborea más la vida», indica Fañanas, que reconoce que «la gente se ha portado muy bien y me están ayudando a dar a conocer este servicio. Los usuarios son muy agradecidos y la verdad es que me da una satisfacción especial atenderles».

Con la llegada de Elena y el eurotaxi, Baltanás recupera un servicio que llevaba alrededor de dos décadas perdido, desde que lo dejó Matías García. La plaza salió a concurso el pasado verano y Elena se adentró en esta aventura.

El taxi cuenta con una plataforma y una buena accesibilidad, por lo que está adaptado para discapacitados y mayores. Dispone de cinco plazas con conductor más silla de ruedas o siete plazas, aunoólo autoriza cuatro plazas más la del conductor. «Es una reivindicación por la que están luchando desde la Asociación de Taxistas y confiamos en que lo cambien, como ya ha ocurrido en otras comunidades autónomas», señala Fañanas.

Eurotaxi Baltanás está disponible las 24 horas del día, los 365 días del año. Es un servicio que tiene la plaza en Baltanás pero que nace con vocación comarcal, por lo que Elena se mueve por todos los pueblos del Cerrato. Antigüedad, Baltanás, Castrillo de Don Juan, Cevico de la Torre, Cevico Navero, Cobos de Cerrato, Espinosa de Cerrato, Hérmedes de Cerrato, Hornillos de Cerrato, Reinoso de Cerrato, Valdecañas de Cerrato y Villaviudas son algunos pueblos donde ya ha prestado sus servicios. «Mi idea es dar servicio a los pueblos donde no llega el transporte. Y la gente lo necesita y lo agradece», destaca la taxista.

Un servicio fundamental es el acompañamiento al hospital. «En ocasiones, cuando no hay nadie con los pacientes, me quedo acompañándoles en las pruebas médicas y les llevo de nuevo a su casa. Procuro que sea un servicio a la carta, donde recojo a la gente en sus casas, les llevo al médico, les acompaño y les dejo de nuevo en sus casas. Es un servicio muy necesario en el Cerrato», comenta Fañanas, que quiere dejar claro que «el taxi en esta comarca no es un servicio de lujo, es una necesidad, por lo que los precios son económicos. Es un servicio que se amolda a la vida diaria».

De este modo, los viernes suele llevar a gente de los pueblos del Cerrato al mercadillo de Baltanás para hacer la compra y otras gestiones, incluso muchos usuarios se ponen de acuerdo en las horas y comparten el taxi. También hay usuarios que acuden entre semana a Baltanás para hacer la compra, ir al médico, al banco o a la farmacia. Los fines de semana los usuarios suelen ser los jóvenes, que evitan llevar el coche de fiesta o que aprovechan para ir a las fiestas de los pueblos de la zona.

También hay personas que van perdiendo la movilidad, por lo que usan a diario el taxi para tomar café en el bar y estar con la gente, lo que mejora notablemente su calidad de vida. Elena Fañanas ya es una cerrateña más, que compagina el trabajo del taxi con el huerto, las clases de guitarra, la lectura y con Dolce, su perra viajera que suele acompañarla en algunas de sus carreras.

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