El 43% de los pueblos de Palencia carecen de escudo heráldico

Solo 109 de los 191 municipios disponen de un diseño que los distinga

LEONOR NIETO

Lunes, 15 de agosto 2016, 13:08

Esculpidos en piedra, ondeando en banderas y compuestos por torres, báculos, cruces, calderos y coronas que bailan sobre fondos rojos, azules y verdes intensos. Así son los escudos que recogen un pedazo de historia de muchos pueblos palentinos. Los símbolos que ocupan los escudos esconden numerosos secretos tras de sí. El historiador, técnico de Cultura de la Diputación y especializado en heráldica de la provincia de Palencia, Faustino Narganes Quijano, lleva años desvelándolos.

Publicidad

La heráldica, según explica de forma simplificada Quijano, «es un sistema de signos compuestos por símbolos y colores colocados en el interior de un escudo». Su objetivo es el estudio de las armerías y emblemas insertos tanto en su interior como en el exterior. «Cada corona y condecoración tiene un significado», indica el experto.

La heráldica posee un lenguaje propio que puede resultar complicado ante los ojos de quien nunca ha tenido contacto con esta ciencia, en la que nada es lo que parece. El color rojo se denomina gules, el azul se conoce como azur y el verde cambia de nombre para ser bautizado como sinople. Los colores metálicos (oro y plata) también están presentes en la mayoría de escudos. «El púrpura y el sable (que corresponde a lo que se conoce corrientemente como negro) apenas se utilizan en Castilla y León», señala Faustino Narganes.

Los orígenes de la heráldica se remontan a mediados del siglo XII, momento en el que los caballeros medievales deseaban contar con escudos de armas que les identificase claramente en los combates, justas y torneos, por lo que eran necesarios unos diseños que fuesen claros y comprensibles incluso a distancia.

Las representaciones, según afirma Quijano, «deben buscar la simplicidad en sus formas, resaltando y exagerando los detalles». «Hay que dibujar los símbolos como lo haría un niño, no se busca un resultado estéticamente bonito», explica el historiador.

Publicidad

Existen unas reglas básicas para realizar el diseño de una armería heráldica, y una de ellas es la simetría. Faustino Narganes señala que «debe existir armonía óptica». El contorno y el tamaño del escudo deben ser equilibrados y las figuras que lo ocupen deben hacerlo de forma prácticamente total. El experto en heráldica apostilla que «un mueble (así se conoce a cada uno de los símbolos que aparecen en el escudo) no puede aparecer bailando, aunque lamentablemente muchos pasan por alto esta regla».

En la ciencia heráldica, cada imagen y cada color tiene un significado. El rojo simboliza la sangre derramada en las guerras; los calderos, el número de personas a las que mantenía el señor y las hazañas de los antepasados por cabezas. «El escudo de Perales, por ejemplo, tiene árboles frutales porque allí hay muchos, y por esa razón el pueblo fue bautizado con ese nombre», explica Narganes.

Publicidad

De los 191 pueblos que conforman la provincia de Palencia, 82 (casi el 43%), carecen del escudo municipal. Villamartín, Cobos de Cerrato, Boadilla de Rioseco y Cevico Navero son algunos ejemplos. Narganes Quijano ha diseñado 44 escudos a petición de los Ayuntamientos de municipios palentinos como Barruelo, Magaz de Pisuerga, Osornilo y Venta de Baños. Actualmente se encuentra inmerso en el diseño del escudo de la localidad de Villahán.

Faustino Narganes lamenta que «muchos municipios palentinos no respeten las normas heráldicas y las adopten según sus preferencias». «En numerosas ocasiones se busca que el escudo sea simplemente bonito, sin importar si el diseño es correcto o no», explica. En caso de que un municipio acuerde adoptar, modificar o rehabilitar un escudo o bandera, el historiador debe investigar los archivos con el fin de compro

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad