Cáritas atendió a 2.386 personas en 2014 sin recursos y en riesgo de exclusión

Cáritas, la organización de la Iglesia Católica que se dedica a gestionar recursos para personas en riesgo de exclusión social, atendió el año pasado a 2.386 usuarios, 372 más que en 2013. Estos datos fueron difundidos este lunes por el presidente de Cáritas, Juan José Martínez, en la presentación de la memoria de 2014 y de los actos que se van a celebrar esta semana con motivo del Día de Caridad, que coincide con el Corpus Christi.

Las 2.386 personas atendidas en 2014 por Cáritas son los usuarios de los programas más importantes que desarrolla. El servicio de Acogida y Atención Primaria fue definido por Juan José Martínez como el más fundamental, porque «la acogida es inherente al ser y hacer de Cáritas y el eje de cualquiera de sus actuaciones». «Es la puerta de entrada más importante que Cáritas tiene para todas las personas que se acercan a nosotros», puntualizó el presidente de la organización, que compareció acompañado del secretario general, Javier Navarro.

De hecho, este programa se desarrolla de forma coordinada con las Cáritas locales y las parroquias de la Diócesis, y en él intervinieron el año pasado 136 voluntarios en la capital y en la provincia. En 2014, el servicio de Acogida y Atención Primaria atendió a 1.518 personas, que se distribuyeron en 236 familias y 719 usuarios sin vínculo familiar. El año anterior, el número de personas atendidas en esta puerta de entrada a los servicios de Cáritas fue de 1.157. Juan José Martínez destacó la importancia de este dato, porque todos ellos son palentinos.

Otro de los recursos más importantes que gestiona Cáritas es el Centro de Atención a Personas sin Hogar, conocido como el albergue. El año pasado atendió a 814 personas, mientras que en 2013 pasaron por estas instalaciones 793 usuarios. Martínez detalló que el 91% son hombres y el 9% restante, mujeres. También citó un detalle: 103 personas utilizaron el albergue por primera vez, un dato que el presidente de Cáritas calificó de «alarmante». «Algo no estamos haciendo bien», se lamentó. «El equilibrio psíquico de estas personas es muy frágil. Están casi al límite, bien sea porque han tirado la toalla, no han tenido voluntad de salir adelante o la vida les ha tratado mal», aseguró el máximo responsable de la organización caritativa de la Iglesia.

De los usuarios de 2014 del centro de atención a personas sin hogar «preferimos esta nominación del centro a la de transeúntes o sin techo, por el sentido de hogar y acogida que tiene», señaló Juan José Martínez, destacó que 601 fueron españoles, 144 comunitarios y 62 extracomunitarios. En el caso de dos personas no se pudo conocer el origen. De las edades de estos usuarios, el presidente de Cáritas resaltó que siete tenían entre 15 y 19 años. Por el estado civil, 416 fueron solteros;106, divorciados; 55, casados; 80, separados y 27, viudos.

El tercer servicio de Cáritas que marca el número de usuarios que atiende son los que pernoctan en la casa para reclusos de la cárcel de Dueñas que salen de permiso y no tienen dónde acudir o presos que tienen difícil lograr un permiso porque carecen de un lugar que acreditar. En este caso, en 2014 fueron 54, una cifra que supone un descenso en relación a 2013, que fueron 64.

Juan José Martínez destacó ayer la política de transparencia que persigue Cáritas en la gestión de sus recursos y en el origen de sus aportaciones. El presupuesto de la organización en 2014 fue de 1.43.080 euros. Los ingresos proceden de los socios (61.580 euros), donativos generales (308.744), legados (259.083 euros), Conferencia Episcopal Española (86.786), Campaña Nacional de Caridad (53.751), campaña de Navidad (23.183), otras campañas (26.526), Cáritas Española (21.149), subvenciones del Estado (118.408), de la Junta (273.497), de la administración local (98.000), de entidades privadas (28.960), imputaciones subvenciones de capital (67.482) y otros ingresos (2.924).

Cáritas Diocesana recibió en 2014 por herencias y legados en patrimonio, y del traspaso de una parte de la Agregación de Fundaciones Asistenciales, una cantidad estimada en 195.252 euros, una vez deducidos los pagos a los legatarios y los gastos asociados a la transmisión.

Por otra parte, la Fundación El Buen Samaritano, que creó el anterior obispo, Esteban Escudero, para ayudar a personas en paro y que gestiona Cáritas, atendió en 2014 a 22 familias, con un montante de ayudas de 21.461 euros.