La Diputación destinará 27 de cada 100 euros a servicios sociales en 2015

La Diputación de Palencia no tiene contemplado en su reglamento interno la celebración de un debate sobre el estado de la provincia. Sin embargo, el pleno en el que se aprueba el Presupuesto del siguiente año suele convertirse en debate general sobre la situación de este territorio. Este viernes no fue una excepción, sobre todo por iniciativa del portavoz del PSOE, Jesús Guerrero, que cuestionó globalmente las políticas del PP, fundamente en asuntos como la sanidad y la educación, lo que motivó la reacción del presidente, José María Hernández, instando al diputado socialista a ceñirse al presupuesto de 2015. Guerrero se mostró muy crítico con el PP, aun reconociendo que la Diputación palentina solo es responsable de parte de esa situación, avalada en su opinión, por unos «datos sangrantes», y que electoralmente a los populares no les va mal. El portavoz de IU, Félix Iglesias, recordó que los populares gobiernan la Diputación desde hace muchos años, pese a la cual habló de «situación de provincia fallida».

La Diputación tendrá el próximo año unos gastos y unos ingresos de 65.698.016 euros, lo que supone un incremento del 2,58% respecto a este año. Granda definió este presupuesto como el de la «consolidación del esfuerzo realizado en los últimos años por el equipo de gobierno y por los trabajadores de la institución». También dijo que es un documento realista y que ayudará a «movilizar iniciativas en la provincia, tanto por parte de los empresarios como de los ayuntamientos». El diputado de Hacienda agregó que el presupuesto ayudará al mantenimiento y creación de empleo y del tejido social al favorecer obras y otras actividades.

Igualmente, señaló que con este documento presupuestario el equipo de gobierno, «trata de mejorar la calidad de vida de los habitantes de Palencia». Granda defendió el presupuesto porque continúa rebajando la deuda y permitirá seguir pagando en tiempo y forma a los proveedores ahora esto se realiza en once días, recordó. Por último, destacó el marcado carácter social de los presupuesto al destinar 27 de cada 100 euros a servicios sociales.

Félix Iglesias inició su intervención asegurando que se siente en un «bucle» al definir el presupuesto como conservador. El portavoz de IU recordó que el paro ofrece «datos esclarecedores y nada halagüeños», y definió el presupuesto con las expresiones «tramposo desde el principio», «malos y con una ejecución pésima» y «con políticas tan austeras que no llegan a los ciudadanos». Iglesias mantuvo que del presupuesto de 2014 solo se ha ejecutado un 25,5%, porcentaje que Mario Granda elevó a más 80%.

El portavoz del PSOE realizó una valoración muy negativa del presupuesto, del que dijo que no tiene objetivos claros para corregir los problemas de la provincia. Jesús Guerrero criticó que para el PP los únicos objetivos del presupuesto son rebajar la deuda y ejecutarlo antes de las elecciones, por lo que le definió como electoralista. «Este es el presupuesto, junto al de 2014, más bajo de la última década, a pesar de que está hinchado artificialmente», aseguró el diputado socialista, y el de menor inversión de los últimos 16 años. Calificó de excesivo el gasto corriente y reclamó un incremento de las inversiones «porque se puede perfectamente», señaló.

Pese a que Jesús Guerrero ve aspectos positivos los Planes Provinciales, el reparto «razonablemente equilibrado» de la chequera presidencial, aunque abogó por eliminarla, y el aumento de las cantidades para el fondo incondicionado, el edil socialista apostilló que el presupuesto «sigue estando ausente de los grandes problemas de la provincia». El portavoz socialista calificó de fracaso la política en turismo y en promoción económica, lo que ha conducido, en su opinión, a que se acuse la despoblación. Por esta razón, Guerrero reclamó al equipo de gobierno un «plan provincial de empleo eficaz y no el seguidismo del de la Junta», la creación de un fondo municipal para transferencias incondicionadas y que abandone la política de corto plazo y con interés electoralista.

Mario Granda, en respuesta a las primeras intervenciones de la oposición, volvió a defender el presupuesto elaborado por el equipo de gobierno «porque ayuda a todo aquel que nos lo ha pedido y en todos los rincones de la provincia», el portavoz popular y diputado de Hacienda aseguró que el presupuesto «estimula la creatividad de las personas, porque estimula a la gente a hacer cosas».

Félix Iglesias aprovechó una segunda intervención para proponer que los municipios reciban más dinero incondicionado, que se promueva un banco de tierras para poner a disposición de los agricultores y se firmen convenios con el campus de La Yutera para desarrollar la micología, la enología y la ganadería. «Hay que luchar contra la despoblación con otros sistemas», matizó.

El debate lo cerró el presidente de la Diputación. José María Hernández defendió la política aplicada en la Diputación en los últimos tres años y medio, «que ha intentado cumplir con la estabilidad presupuestaria, reducir la deuda, mantener los servicios y apoyar a los ayuntamientos y entidades sin ánimo de lucro. También recordó que su equipo de gobierno renunció a las grandes obras para centrarse en pequeñas actuaciones pero necesarias.

También destacó la búsqueda de una mayor ejecución presupuestaria. Hernández señaló que el presupuesto puede ser electoralista, pero matizó que pretender que las obras se ejecuten en el primer semestre del año afecta a todos los ayuntamiento. Por último, el presidente de la Diputación mantuvo que la vida de las personas en el medio rural está impregnada del apoyo de la institución provincial.

La votación del presupuesto fue el fiel reflejo del debate. Solo el PP lo apoyó, mientras que la oposición votó en contra.

Por otro lado, en el pleno de ayer se aprobó también la nueva plantilla de la Diputación, que está formada por 359 plazas (196 de funcionarios, 154 de personal laboral y 9 eventuales). En la actualidad están cubiertas 297.