Pedro Espina, en el centro, en la presentación del libro en el Museo del Cerrato.

Una galería de recuerdos cerrateños

Pedro Espina presenta en el Museo del Cerrato un libro sobre el medio rural, en el que homenajea a su pueblo natal, Valle de Cerrato

LUIS ANTONIO CURIEL

Martes, 30 de septiembre 2014, 12:19

El Museo del Cerrato Castellano ha acogido recientemente la presentación del libro El Cerrato Castellano. Galería de los recuerdos. Años 1934-1956, unas memorias vistas en el año 2012 por su autor, Pedro Espina Pérez.

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La publicación recoge diversos temas dedicados a las plantas silvestres y otros productos comestibles del Cerrato; animales de labor y sus aperos; la agricultura tradicional; la ganadería; recursos, medios y utensilios de la época; instrumentos agrícolas; labores artesanales; juegos de la infancia; aperos de labranza y otros menesteres relacionados con los hogares. La guía cuenta con numerosas imágenes que ilustran el contenido de la publicación, con el fin de facilitar a las generaciones presentes y venideras la identificación de muchos aperos, utensilios y labores que actualmente están en desuso.

La mayoría de los recuerdos tienen su origen en Valle de Cerrato, pueblo natal del autor, donde pasó su infancia y juventud, y con el que sigue profundamente vinculado. «Este libro es un canto a la tierra, un homenaje a mis gentes de mi querido pueblo de Valle de Cerrato. Es una guía para los que lleguen después y continúen con la historia del Cerrato», señaló emocionado Pedro Espina durante la presentación de su obra, en un emotivo acto, en el que estuvo acompañado por numerosos cerrateños.

La publicación recoge numerosos términos y vocablos utilizados en las faenas del campo, en las labores artesanales y en los utensilios de casa, que permiten al lector conocer y profundizar en la historia reciente de las diversas actividades del Cerrato Castellano.

El libro, prologado por Isacio Calleja García, puede adquirirse en Valle de Cerrato y en el Museo del Cerrato. La presentación se desarrolló en un ambiente especialmente entrañable, en el que los recuerdos del ayer sirvieron como semilla de presente y futuro para los numerosos cerrateños congregados, que apuestan por mantener viva su historia.

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