Los 105 guardias de Tráfico pondrán el foco en verano en las autovías, en especial la A-67

«Me preocupa la cantidad de incidencias o afectaciones que tiene la A-67 por las obras de la línea de la alta velocidad, porque son varios puntos, sobre todo de cara al verano. Con el aumento de la densidad circulatoria, veremos a ver si no tenemos un repunte de la siniestralidad. En el corte que hay en el kilómetro 30 en sentido a Palencia, en Piña de Campos, se desvía a la N-611, y hay que atravesar la travesía de Amusco. Hace días, sin ser aún verano, hubo un serio problema de circulación porque se formaron retenciones de dos kilómetros en la autovía porque en la travesía de Amusco, debido a unas bandas reductoras que se han puesto, los conductores tienen que adecuar la velocidad y los frenazos se van trasladando hacia atrás», explica Eduardo Yugueros.

«Pero, según me comenta un responsable de la obra que se está haciendo en las inmediaciones de Amusco-Monzón, la calzada en sentido hacia Palencia tienen intención de abrirla antes del 1 de julio. Es una buena noticia porque la subida hacia Cantabria es más escalonada, pero no así al regreso», indica el capitán jefe del Subsector de Tráfico.

«Las vías de comunicación de la provincia soportan en época estival un incremento bastante considerable de la densidad de circulación por desplazamientos transfronterizos, personas que viven en Europa y se desplazan hacia Portugal o Marruecos para disfrutar de sus vacaciones, o por los desplazamientos hacia la zona cántabra, que vienen personas desde muchos puntos de España para unos días de vacaciones. Los pueblos de la provincia también sufren un aumento importante de población, lo que se traduce también en un incremento de los desplazamientos», hace hincapié Eduardo Yugueros, que incide en que algunas intensidades medias de circulación se pueden duplicar o incluso triplicar en el verano.

«Vías de alta ocupación son la A-67, la A-62, la A-231, el trocito que tenemos de la A-73... La A-62 tiene su origen en Portugal y termina en Turquía, y es una ruta por la que transita muchísimo vehículo pesado. Está en proyecto la ampliación a un tercer carril por sentido desde Palencia hasta Tordesillas, y es necesario porque soporta mucho tráfico. Es una autovía que en algunas zonas carece de arcenes practicables o con la suficiente anchura como para permitir que un vehículo pueda parar en caso de emergencia, y el trazado es sinuoso, pero todo eso está en vías de solución con el nuevo trazado, que suaviza en gran medida las curvas de Dueñas», señala el capitán jefe del Subsector de Tráfico, que tiene un catálogo de puestos de trabajo de 126 efectivos y que, a día de hoy, cuenta con una cobertura de más del 80%.

«Más que reforzar el servicio en verano, lo que se hace es reorientarlo. Nos enfocamos más en las vías de alta ocupación, que son las que sufren un mayor incremento de la densidad circulatoria, y en las vías de menor importancia lo que hacemos es tener muy presente el calendario de eventos y fiestas para combatir principalmente dos de los factores recurrentes en los siniestros viales: el consumo de alcohol y de drogas», incide.

«Afortunadamente no tenemos ninguna carretera que se caracterice por concentrar un mayor número de siniestros viales mortales en la provincia, los que han ocurrido en los cerca de seis años que llevo en Palencia son muy dispersos. No tenemos un foco en el que centrarnos, enfocamos nuestros esfuerzos en aquellas vías donde hay una mayor densidad circulatoria. Como no podemos abarcar los más de 4.000 kilómetros de vías pavimentadas que hay en la provincia, nos centramos en las vías de alta ocupación, que son las autovías, las carreteras nacionales y las autonómicas de primer orden, como la CL-613, la CL-615, la CL-619 y la CL-626», explica el capitán jefe del Subsector de Tráfico, que destaca cómo, con los radares de tramo, ha habido una disminución considerable de la siniestralidad vial en la CL-615 y la CL-613. «En la CL-626 no sería mala idea que también hubiera radares de tramo, pero es una carretera que por su trazado no permite alcanzar grandes velocidades porque es muy sinuosa», añade Eduardo Yugueros, que destaca que hay dos puntos negros en la provincia.

«Punto negro es aquel en el que ocurren tres o más siniestros viales en el periodo de un año con el resultado de heridos, pero ninguno de los tres fueron de carácter grave. Tenemos un punto negro en el kilómetro 1,100 de la P-405, una de las rotondas de Villalobón, y otro en la salida de la A-73 hacia la N-627, que termina en una rotonda y hemos tenido muchas salidas de vía porque los usuarios de la vía no adecuan la velocidad a la señalización y singularidad del trazado», concluye.