Edgar Alan Poe que estás en los cielos

Edgar Allan Poe tenía especial predilección por 'La caída de la casa Usher', quizá su obra más redonda. Un relato largo con ecos de la ... novela gótica clásica, pinceladas tétricas y compleja ambientación en el que se explayó con numerosas citas, poemas completos y una larga relación de títulos de libros que mi amigo Ariel Conceiro lleva media vida buscando. Nórdica ha sacado una preciosa edición ilustrada y algunos clientes se están quejando porque «el libro no tiene nada que ver con la serie de Netflix». Parece que no aprendemos. Y, sí, efectivamente, tiene muy poco que ver con la serie, lo que no quita para que el relato sea una auténtica joya y la serie todo un festival a la gloria de Poe. Y es que cualquiera que ame al genio de Boston no puede por menos que caer rendido ante el último juguete de Mike Flanagan. Ya desde el argumento nos damos cuenta del complejo universo creado alrededor de la figura de Poe. Dos ambiciosos hermanos (Roderick y Madeline Usher) dueños de un imperio alrededor de la empresa farmacéutica Fortunato son investigados por el fiscal Auguste Dupin, pero el abogado de la familia (Arthur Pym) siempre ha encontrado la forma de contrarrestarlo, al menos hasta que los herederos mueren uno tras otro de forma misteriosa y brutal. Los guiños a la obra de Poe son evidentes: desde la utilización de los nombres de los protagonistas a la elección del título de los capítulos. El primero de ellos responde al primer verso de 'El cuervo', su poema más famoso (Una lúgubre medianoche) y el último se titula, precisamente, 'El cuervo'. El resto de los episodios lleva el título de algunos de sus relatos más memorables: 'La máscara de la muerte roja', 'Los crímenes de la calle Morgue', 'El gato negro', 'El corazón delator', 'El escarabajo de oro' y 'El pozo y el péndulo'. La cosa no queda ahí. Todo en la serie son juegos literarios, homenajes, guiños y todo un canto de respeto y reverencia a Poe. Hay un personaje (protagonizado por la gran Carla Gugino) que tiene la llave del misterio y que es un claro equivalente al cuervo, una especie de mensajero o ángel de la muerte. Ese personaje responde al nombre de Verna, un anagrama de la palabra cuervo (en inglés, raven). La serie respira literatura por los cuatro costados, no solo por las referencias continuas a las historias de Poe, sino también por los largos e inteligentes monólogos de los personajes. La modernización brillante, tenebrosa, gótica y sangrienta de Poe acaba convirtiéndose en una crítica despiadada a las farmacéuticas, a las grandes empresas, a la IA, a los opiáceos y a las familias poderosas. He leído alguna crítica en la que se quejaban de que Mike Flanagan alargaba innecesariamente el relato de Poe, lo que da a entender que el crítico en cuestión no se ha enterado de que 'La caída de la casa Usher' no está basada en ese relato, sino en un buen montón de cuentos de Poe. En fin, que es fantástico ver cómo recrean el universo de Poe actualizándolo al siglo XXI. ¿No se podría hacer lo mismo en España? Por ejemplo, con el universo de Valle-Inclán, juntando sus libros y sus personajes en una historia actual. De hecho, no se me ocurre nada más esperpéntico que lo que estamos viviendo últimamente en el mundo entero.