Una vez vi el Taj Mahal. Un Taj Mahal como todos los Taj Mahal. Copio a esa chica que al volver de visitar Granada y la Alhambra y al ser preguntada qué le había parecido, dijo: «Bah, una Alhambra como todas las Alhambras». He crecido ... con la inscripción en una pared de la catedral de Murcia: «¡José Antonio Primo de Rivera, presente!», hecha poco después de la guerra. Esas cosas deberían permanecer. Querer borrar la historia (por mucha ley que lo autorice) es como tratar de matar a Blancanieves porque es más guapa que tú. Y siempre voy a preferir a la madrastra/bruja que a la mema resucitada. En una pared muy grande de Puertollano alguien escribió «Vanpiro esiste». Un día lo vi. No fue un standhalazo, pero di un grito en el coche y los demás pensaron que había enloquecido. Es el mismo entusiasmo vacío y pop de ver el Ecce Homo de Borja. Lo han borrado. Si vivimos tiempos echados a perder hay que estar a la altura y no borrar esas joyas.
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