'Tonteridas' electorales

Aznar estrenó campaña: «Hay muchas personas que se agarran a supuestas soluciones baratas, fáciles, mágicas, a populismos mentirosos…». Y a su lado Mañueco que, para no agarrarse a soluciones baratas y fáciles, aseguró que este año habrá procesiones de Semana Santa. Bingo, el voto de las imágenes procesionales lo tiene garantizado, pero no creo que los que no quieren soluciones mágicas, que decía Aznar, se den codazos para votarle.

¡Qué a gusto debió de quedarse Inés Arrimadas cuando aseguró que «PSOE y PP llevan muchos años dedicándose al politiqueo, asentado en puñaladas y mentiras»! La seño de Cs no se ha enterado de que Cs estaba en el Gobierno y que su candidato era el vicepresidente. Cs, como se sabe, nunca entró en politiqueos, pese a que, estando en el Gobierno con el PP, pasteleaba mociones de censura con el PSOE. Lista la seño, que tuvo resuello para enviarle un recadito a Mañueco: «Ni Madrid es Castilla y León, ni tú eres Ayuso». La presidenta de Madrid es el referente del éxito, todos quieren ser como ella. Pues nada, que nos hagan un Valladolid de cañas y pinchos.

Las ellas de UP, de romería en Castilla y León, han aparcado su condición de ministras y vice para marcar distancia con el Gobierno en el que están, en la mayoría de los casos, por ser meras cuotas, floreros de un compromiso. ¿Dónde dejaron a Garzón, ministro de Algo? Ocasión perdida para haberle invitado a un buen ternasco.

Tudanca, enardecido por las trolas del CIS de Tezanos, aclara lo que está sobre el tapete: «Nos jugamos que sigan metiendo la mano de forma indecente en nuestra tierra». ¿Qué dijo? Nada. ¿A quién señaló? A nadie. ¿Qué quiso decir? No lo dijo. Y si se refiere a alguna indecencia, seguro que lo atenderán muy bien el en juzgado de guardia.

A una semana, todas las encuestas, menos las del CIS del hilarante Tezanos, coinciden en que el PP ganará las elecciones, sin que pueda hacer de su capa un sayo, que el PSOE se daría por satisfecho si no se aleja mucho de lo que ya tuvo y que Cs va a cerrar muchas sedes. Los demás, migajas, aunque puedan alimentar a un gorrión.