Latinajos

Suenan sirenas de peligro de guerra. El mundo, dice el que sabe, se encamina a la catástrofe. ¿'Cui bono'? ¿Cómo era aquel otro latinajo? Ah, sí: 'si vis pacem, para bellum'. Si quieres la paz, prepara la guerra, ármate hasta los dientes, dedica todo tu dinero a la compra de armas, cambia hospitales por misiles, escuelas por bombarderos. El PIB, para las armas, a los fabricantes de armas. Nos meten el miedo en el cuerpo, nos imponen políticas ultras, violentas; de tanto verlo, no nos escandalizamos con las masacres, con el genocidio palestino, con las maneras asesinas de Putin. Vivimos ya en guerra y, cuando se extienda, cuando un misil israelí caiga en Teherán o uno ruso en Varsovia, no nos sorprenderá y no haremos nada ni reclamaremos responsabilidades. ¿'Cui prodest', que es lo mismo que 'Cui bono'? A los de siempre, a los estúpidos avarientos, a la mala gente que apesta la tierra.