na Sánchez, Pedro Sánchez y Luis Tudanca, en un encuentro en Castilla y León. EL NORTE

Sumisos Castilla y León, SL

LA ESPITA ·

Mañueco no contaba con los indultos; Tudanca, tampoco. Pero en el ecuador de la legislatura, el presidente de la Junta tiene una gran baza contra el secretario socialista

J. I. Foces

Valladolid

Domingo, 27 de junio 2021, 08:27

Los indultos han llegado esta semana porque Pedro Sánchez, en su ensimismamiento electoral, cree (o le han dicho) que cuando toque ir a votar, no antes de dos años para municipales y autonómicas y no antes de dos y medio para las generales, la ... sociedad española estará suficientemente aletargada y no solo no se acordará de los indultos, sino que incluso podrá agradecerle con votos la medida de gracia a los independentistas catalanes. Sorprende que a estas alturas ni el aparato del PP de Castilla y León –al segoviano Francisco Vázquez le cuesta reaccionar y no digamos tomar la iniciativa– ni los seguidores de Santiago Abascal –por estos lares bastante aristocráticos a la hora de hacer política– hayan sacado a relucir en las Cortes la famosa foto de Jordi Sánchez y Jordi Cuixart subidos a un coche patrulla de la Guardia Civil, megáfono en mano, arengando a las ordas de manifestantes contra los agentes de la Benemérita que estaban en el interior de la Consejería de Economía en Barcelona. Haga ese ejerccio el lector, háganlo los dirigentes políticos y entenderán que no hay indulto posible que pueda hacer olvidar los sucesos de octubre de 2017 en Cataluña y la declaración 'interruptus' de independencia.

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Los indultos, pese a los empeños de los sanchistas, ni van a ser la solución ni van a provocar desmemoria. Menos aún en estas tierras castellanas y leonesas. Los efectos electorales contra el PSOE van a existir. Y los socialistas castellanos y leoneses, aunque no lo confiesan, son conscientes de ello.

Alfonso Fernández Mañueco. EL NORTE

El presidente Alfonso Fernández Mañueco no contaba con los indultos en el ecuador de su primera legislatura al frente del Gobierno de Castilla yLeón. El secretario regional socialista, que no líder, Luis Tudanca, tampoco. Para el presidente de la Junta, los indultos de Sánchez a los independentistas son un arma (y un regalo) frente el PSOE de Castilla y León, de seguros efectos letales para este. Para Tudanca, esos mismos indultos son como un bloque de hormigón armado en su hacer diario. Si sin haber sido aplicados los indultos, las encuestas estos dos años de Gobierno del presidente Mañueco han dado la vuelta a su favor, qué no imaginar que pase en los dos que quedan.

La razón es bien sencilla. Tras los indultos, y el mensaje de los independentistas de que ellos no abandonan su objetivo, viene una segunda parte: la de la chequera. Va a ser un festival de millones de euros lo que se va a mover a favor de Cataluña. Y si los recursos son escasos, para que la millonada vaya para Cataluña hay que quitársela a otras tierras. ¿Cuál mejor para Sánchez que Castilla y León? ¿Hay una federación socialista en España más sumisa que la que dirigen Tudanca, Ana Sánchez y Virginia Barcones? Cuando anunciaron desde La Moncloa el perdón a los independentistas, Tudanca expresó, como hace él las cosas, en voz baja y mirando a Canarias, que eso de los indultos le provocaba dudas. Ni un día tardó en despejarlas y acatar lo que diga Sánchez. Vuelve el PSOE más sumiso de Castilla y León ante Ferraz y La Moncloa, el de los peores tiempos de las presidencias de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero. Sumisos Castilla y León, SL, marca de la casa socialista en esta región.

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González y Zapatero. EL NORTE

Exceptúen al alcalde de Valladolid, Óscar Puente, que mantiene criterio propio en su hacer y dice las cosas altas y claras, se trate de indultos o de lo que se trate; exceptúen al alcalde de León, José Antonio Díez, que, al plantar cara a José Luis Ábalos por no invertir desde su ministerio en los compromisos adquiridos con León, ha demostrado que como regidor leonés tiene un par bien puesto; ahora traten de hacer una lista de cinco nombres de dirigentes socialistas de Castilla y León con criterio frente a sus mandamases de Madrid. ¿A que les cuesta?

Los Presupuestos del Estado de 2022, cuya aprobación se ha asegurado Sánchez con los indultos, van a ser un poema con territorios como Castilla y León, donde el PSOE va a ser incapaz de conseguir nada para estas tierras porque, si algo ha logrado en estos últimos años, ha sido que en Ferraz y en Moncloa no les tengan el más mínimo respeto.

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Así las cosas, al presidente Mañueco se le abre un horizonte en el que su papel institucional puede quedar consolidado, y para un largo futuro, si sabe defender bien a Castilla y León ante dos hechos que se presentan estratégicos: los fondos europeos de recuperación y los Presupuestos del Estado. Eso sí, surgen enormes dudas de que el aparato regional de su partido y algunos de sus consejeros sean capaces de seguirle.

Juan José Lucas, presidente de Castilla y León de 1991 a 2001, y Juan José Laborda, cuando este presidía el Senado. EL NORTE

Mientras, suenan tambores que auguran que Luis Tudanca puede hacer pronto un 'juanjolaborda'. (Juan José Laborda, burgalés como Tudanca, salió pitando en cuanto pudo de la política regional en 1989 tras haber perdido en las elecciones de Castilla y León en 1987 ante José María Aznar. Entre 1987 y 2001, con un gobierno de coalición con los centristas, el PP consolidó una larguísima mayoría absoluta. El escenario fue muy similar al de ahora. A buen entendedor...)

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