Secciones
Servicios
Destacamos
Con las discotecas cerradas y el ocio nocturno clausurado, las pseudo profesiones de la noche han quedado en paro. Perplejos de que su mundo de brillos y dinero fácil, al que se ha hecho la vista gorda desde el origen de los tiempos, se haya ... venido abajo, han creado una clandestinidad del ocio vip semejante a la de Chicago en tiempos de la prohibición del alcohol. Los espabilados organizan fiestas vía Whatsapp en sitios inimaginables y con temáticas escogidas.
Tengo una conocida autoconfinada que ha ordenado su miedo a contraer el virus con mucha lejía y una clausura monacal solo interrumpida por el televisor. En su pasado fue una de esas mujeres bandera cuyo número figuraba en las agendas de los hombres más deseados del planeta. Todavía guarda, además de recuerdos y rentas dudosas, una serie de contactos con los que se entretiene en su encierro, manoseando los secretos oscuros del mundo nocturno de Madrid. Fue ella la primera que me habló del «príncipe africano» un personaje que organiza fiestas en un casoplón de Aravaca. Supuestamente desarrolla, gestiona y trabaja en operaciones de inversión, además de ser un filántropo.
Reconozco que, a mi confidente, se le ha ido borrando la frontera entre la realidad y la fantasía, pero me contó que cuando la Policía entró en la casa donde se celebraba el fiestón sancionó a casi doscientos invitados entre los que se encontraban estos 'famosos' de los que no se sabe a ciencia cierta cómo han llegado a serlo. Y que entre ellos había unas cuantas sirenas. Me pareció una manera preciosa de nombrar a las mujeres embutidas en lentejuelas y se lo dije, pero ella, para ratificar su historia me recondujo a una página web.
Era el instituto de las reinas del agua, una, digamos, empresa que se dedica a reclutar sirenas reales a través de eventos y en la que se hacían castings para localizar a las sirenas de este mundo. Al parecer, ese enigmático príncipe, como Neptuno, necesita nutrirse de la energía que emanan estos seres fantásticos y cree a pies juntillas que en los mares existen sirenas a las que es preciso localizar. El es el líder del Queen of the Waters Institute, un organismo que, según su propia página web, tiene su base en el Golfo de Guinea y nació para el estudio de las «sirenas reales».
Mi amiga ha depositado en él su confianza, como tiene tiempo está cosiendo una cola plateada por si abre sucursal, o convoca un casting cerca de su casa. No sé qué vamos a hacer con las cabezas de los confinados cuando controlemos la covid-19. Esto se nos ha ido de las manos.
Noticia Relacionada
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.