La gran pregunta que cabe formularse es: si los gigantes Inditex y El Corte Inglés cierran tiendas y despiden a miles de empleados, ¿qué no nos depararán los próximos meses en el país de las pymes? La próxima recesión económica ya ha empezado, aunque ... el mecanismo de los ERTE amortigüe su verdadera contundencia. Parte de la dinámica de las empresas implica que ninguna quiera ser la primera en anunciar esto, pero la señal ofrecida por los gigantes marca el camino para que el goteo de noticias se transforme en un aguacero.

Publicidad

Salvo milagro, y hace tiempo que no creo en ellos, en los próximos meses veremos cómo las reducciones de empleos temporal se convierten en permanentes. En Estados Unidos, la Universidad de Standford calcula que el 40% de los empleos no se recuperarán. Por mucho que nunca se haya vivido una covid-19, toda crisis emerge con mayor o menor contundencia en función de los lastres del pasado. De poco servirán, por lo tanto, los 140.000 millones de euros que recibirá España para estímulos en los próximos años (veremos los que finalmente llegan a consumarse) si se utilizan en lo de siempre.

Mientras por estas tierras vivimos entretenidos con los quehaceres políticos de parlamentarios anclados en las cuentas de la vieja para simular mociones de censura de cartón-piedra, fuera del endogámico hemiciclo están pasando muchas cosas. Y la gran mayoría debería avergonzar a una clase política incapaz de contemplar unidad de acción para la que se nos viene encima. Generar estímulos reales para la creación de empleo cualificado ya no es una opción, pero ¿quiénes somos nosotros, los simples mortales, para interrumpir la agenda de sus señorías?

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad