Secciones
Servicios
Destacamos
Durante la pandemia, médicos, enfermeras y el conjunto del personal sanitario dedicaron sus cuidados a los miles y miles de infectados por la covid. Aquello les impidió atender a los que padecían enfermedades habituales o tenían síntomas que exigían un buen diagnóstico. A la ... espera de que lo peor pasara, llegaría el momento de tratarles con la debida atención. Pero ahora esa atención llega a trancas y barrancas.
Ejemplos ilustrativos hay a montones: una profesional que trabaja en un hospital público de Madrid no sabe nunca cuándo va a poder descansar. Se lo comunican en función del trabajo previsto para el fin de semana. Hay que improvisar. Como en su momento, ni se reforzó la atención primaria ni tampoco las especialidades, habrá que recurrir al refranero popular para recordar a quien corresponda que cuando se siembran vientos se recogen tempestades. Es lo que está ocurriendo en muchas comunidades autónomas. En su momento, hicieron oídos sordos a la insistencia de los profesionales y no dotaron a la sanidad pública de recursos suficientes para hacer frente a lo que se venía encima.
Así fue. Y así sigue siendo. Las listas de espera han crecido de forma desmesurada en algunas comunidades. En Andalucía, la atención quirúrgica puede realizarse un año más tarde desde que se solicita y los canarios tienen que aguardar 69 días hasta que se les abre las puertas del quirófano. Los vascos esperan 64 días de promedio y eso que Euskadi es la comunidad con mejores cifras. En la ciudad de Madrid la lista de espera para los especialistas suma más de medio millón.
Los profesionales de la salud y los sindicatos se han quedado roncos denunciando las carencias en los centros de salud. Y lo que es peor, si no se remedia, cuando termine el año concluirán cerca de 50.000 contratos de refuerzo, mientras la vacunación contra el virus de la gripe de esta temporada y, en su caso, el añadido de la tercera dosis de la vacuna contra la covid no han hecho más que comenzar. Con este panorama, no sorprende que las compañías de asistencia médica privada hayan aumentado sus ofertas. Pero, un porcentaje amplísimo de ciudadanos no puede acogerse porque los ingresos, cuando los hay, son los que son.
Este Gobierno, a través del Ministerio de Sanidad y en coordinación con las consejerías, debería presentar sin demora un plan de choque para reducir las imposibles listas de espera e incrementar las dotaciones para la atención primaria. Es el momento. Ahora que se elaboran y aprueban los nuevos Presupuestos para el año que viene. Ya no se puede esperar más.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.