El jugador del Barça Sergio Busquets protesta al árbitro durante un partido de la liga en octubre de 2015. Efe

La reputación

EN DIAGONAL ·

Si no hubiera habido verdadera influencia en las decisiones arbitrales, el Barça sería gilipollas, pero como tantos que dan dinero a consultorías, 'lobbys' y charlatanes varios

Lo peor del asunto del Barça y Enríquez Negreira es la fealdad. Incluso si los servicios hubieran sido de vender humo y no hubiera habido verdadera influencia en las decisiones arbitrales. En ese caso, el Barça sería gilipollas, pero como tantos que dan dinero a ... consultorías, 'lobbys' feroces y charlatanes varios. El nuevo timo de la estampita.

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En un mundo en el que los palabros 'compliance' y RSC campan como banderas de las empresas, parece mentira que el club se vea metido en esto. El 'compliance' es obligatorio (se trata de cumplir la ley, de la integridad) y la Responsabilidad Social Corporativa es deseable, una especie de legitimador social. Ojalá solo portarse bien. Abandonar términos ridículos e ir a la reputación de toda la vida. A Shakespeare en 'Ricardo II': «El más puro tesoro que concede la vida mortal es una reputación intachable, destruida la cual, los hombres son tan sólo barro dorado o pintada arcilla». También los clubs.

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