Qué bonito el desprecio: «Trabajar con Julie Andrews es como ser golpeado en la cabeza cada día con una tarjeta de San Valentín». Aunque se suavizó a lo largo de los años, Christopher Plummer siempre desdeñó 'Sonrisas y lágrimas' (1965), a la que llamaba ... The Sound of Mocus (el sonido de los mocos, tirando de su título original).
Publicidad
Andrews cree que ese cinismo ayudó a su papel, librando al personaje de ser sentimental. Dudo de que sin la película de Robert Wise estuviéramos hablando tanto de Plummer. Solo un poco. Plummer admitió que bebía mucho durante el rodaje y que en la escena del festival de música estaba como una cuba.
A veces no entiendo por qué me gusta tanto la película. Si no puedo odiar a Eleanor Parker (se lió con un cámara y se lo pasó mejor que nadie). Si los niños son insoportables. Si me gustaría que al final los cogieran los nazis. Aunque mi final ideal sería que Julie Andrews acabara con el bellezón de Eleanor Parker.
Noticia Relacionada
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.