El ave rapaz rompe el cascarón y alza su vuelo para destilar el pavor de los cielos. El ave sabe por instinto que hay una víctima dispuesta en algún rincón del planeta, pues la vida se reparte en verdugos y víctimas, y los que aún ... no conocen su destino pronto lo sabrán. La amabilidad es el desafío de nuestro tiempo, un tiempo de leyes sin elegancia y verdugos desapasionados, hijos del injusto terror. Matar es ya una profesión casi aburrida, incluso burocratizada..Siempre que un hombre claudica, otro hay que tiraniza. La primera acción puede ser cobarde, la segunda lo es más.
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Lo he escrito en algún lugar. En la bella noche del cazador sólo hay un animal que se empeña en seguir cazándose a sí mismo. Este mamífero superior está dotado de un cerebro que parece olvidar con frecuencia. No es un dios aunque sueña con serlo, no es un noble león, ni audaz y libre lobo, es simplemente el hombre cazador de hombres
El fantasma de la guerra mueve la paz. En la paz fingida e impuesta se nutre el odio de los pueblos. El idioma del terror tiene pocas palabras, ninguna razón y hechos que hablan por sí mismos. La víctima de hoy mañana será el verdugo. Hay voluntades que sojuzgan a otras que no disponen de oportunidades para aprender a protegerse.
Gloria para los derrotados, gloria para los vencedores. Así era el mundo en que los hombres todavía eran humanos que no habían roto su vínculo sagrado con los dioses de la Naturaleza. Hoy no hay gloria para nadie.
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