Las papeleras utilizadas por los ladrones en el asalto a la perfumería Avenida de Laguna. J. S.

Glamur

Algo que decir ·

«Los seguidores actuales de la pandilla original están perdiendo glamur a pasos agigantados porque lo mismo roban con un coche elegante y caro que con otro más barato y lento»

Paco Cantalapiedra

Valladolid

Viernes, 18 de febrero 2022, 00:02

La banda del BMW se ha hecho tan famosa que rara es la semana que los medios no se ocupan de sus desmanes. Como he dicho alguna vez, sus miembros me recuerdan las franquicias que crecen como setas para vender los mismos artículos en ciudades ... de toda España y más allá. Hablo de negocios serios y prósperos como las grandes firmas nacionales que están en la mente de todos, con la diferencia de que en esas tienes que pasar por caja antes de salir si no quieres que el segurata te llame la atención, y estos bandidos arramplan con lo que sea y escapan a toda leche antes de que vengan los guardias. Digo lo de la franquicia porque es literalmente imposible que sean los mismos delincuentes los que mangan una y otra vez, ya que muchos han sido detenidos en varias ocasiones y algunos continúan en el talego a la espera de ser juzgados en mayo.

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Sin embargo, los seguidores actuales de la pandilla original están perdiendo glamur a pasos agigantados porque lo mismo roban con un coche elegante y caro que con otro más barato y lento, y a veces se conforman con botines que dan risa; el último (por ahora) un cajero vacío, bolsas de patatas fritas, dos o tres tónicas y unos paquetitos de salchichón. No sé si estos manguis alguna vez quisieron parecerse a Luis Candelas, pero me recuerdan más a aquel ratero pucelano al que pillaron dormido en el portal de la casa que acababa de robar. No hay elegancia.

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