![Feve](https://s2.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/202104/25/media/NF032WS1.jpg)
Feve
Rincón por rincón ·
«Ha perdido más de 250.000 viajeros, ingentes cantidades económicas y ha dejado de dar un servicio óptimo a la montaña leonesa»Secciones
Servicios
Destacamos
Rincón por rincón ·
«Ha perdido más de 250.000 viajeros, ingentes cantidades económicas y ha dejado de dar un servicio óptimo a la montaña leonesa»Feve es una ruina. Al menos, en lo estético y en lo social. Una ruina para la propia compañía y una humillación para los leoneses que, durante una década y forma estoica, han asumido cómo la cicatriz de su trazado urbano se cronificaba en medio ... de la incompetencia política.
Aquella vieja compañía ferroviaria que en 1923 inauguraba el trazado entre León capital, estación de Matallana, y la localidad que daba nombre a la misma (a 29 kilómetros de distancia) ha perdido todo su brillo y servicio.
Nada queda de unos trenes abarrotados por pasajeros y mucho menos de los vagones de mercancías cargados de mineral rumbo a Bilbao con el fin de alimentar la entonces pujante industria siderometalúrgica en el norte del país.
Con los tiempos Feve fue poco a poco mudando la piel, dejando a un lado la parte industrial para centrarse en el transporte de viajeros y ahí encontró un encaje realmente interesante: la vía estrecha se convirtió en el nudo de enlace entre la montaña y la ciudad. Feve, entonces, era un regalo diario y los lazos se trenzaban a la misma velocidad a la que se abrían sus puertas.
Si algo tenía bueno ese tren romántico e incómodo es que abrazaba dos corazones, el de las comarcas leonesas y el de la capital. Y con los corazones, a sus gentes, a todas sus gentes.
Los problemas de Feve se escenificaron de forma notable una década atrás, en 2011. Entonces se acometió un proyecto que pretendía reactivar el uso de este tren. Y para conseguirlo en el terreno más urbano se perseguía mediante una urbanización que permitiera romper la barrera que suponían 2,3 kilómetros de hierro y madera entre la estación y la zona de la universidad.
Entonces el nuevo plan de los gobiernos socialistas local y nacional apostaba por un área tranviaria que permitiera romper con esa fractura urbana de norte a sur y abriera las puertas a los vecinos de uno y otro lado de la ciudad.
Fueron meses de felicidad para quienes pensaron que efectivamente el proyecto elaborado en papel tendría traslado a la realidad.
Todo fue mentira, una gran mentira. Diez años después todo sigue igual, o casi. Desde 2011 el vial se corta en La Asunción, a la altura de la zona universitaria de la capital leonesa, sin posibilidad material de superar los 2.367 metros que se extienden desde ese punto hasta la estación de Matallana.
Hoy, como ayer, y como anteayer, la compañía de vía estrecha vive pendiente de nuevos estudios técnicos y legales que permitan hacer compatible la circulación viaria con el tránsito de los vecinos en la zona.
Por el medio Feve ha perdido más de 250.000 viajeros, ingentes cantidades económicas y ha dejado de dar un servicio óptimo a la montaña leonesa.
La última gran noticia es que el proyecto tal cual fue concebido no sirve, se ha quedado caduco, habrá que revisarlo al completo y reestudiar la obra de principio a fin.
Feve es a León como casi todo es a esta provincia y a esta ciudad. Es una ruina, como lo fueron otros proyectos enarbolados sin escrúpulos por el político de turno.
Su historia es la de un fracaso, el mismo fracaso que sirvió para envolver la candidatura leonesa a la nueva sede de europea de ciberseguridad o, en los últimos días, la misma fracasada opción de acoger la escuela de estudios penitenciarios.
Cada proyecto que se intenta revitalizar es un mazazo para la provincia, cada anuncio oficial una historia del desencanto. Uno tras otro, y no hay fin.
Tanta desilusión hace que no sea extraño lo que dice el padrón en su último informe: aquí no se queda ni dios, aunque poco importe a la clase política.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.