Dieta para una sola salud

Recomienda una ración al día de legumbres y tres a la semana de pescados y mariscos. En el caso de la carne lo reduce con respecto al informe anterior, a un máximo de tres raciones. Los lácteos son otros de los productos damnificados, para los que se pide moderación, pasando a tres raciones diarias como máximo. Las frutas y hortalizas son, por supuesto, el plato fuerte. Cada día, dos o tres raciones de frutas y, al menos, tres de hortalizas. Cuatro huevos a la semana y entre tres y seis raciones de cereales diarias. Y no nos olvidemos de los energéticos frutos secos, que se puede tomar una vez al día. El aceite de oliva como argamasa de esta construcción alimentaria, bien crudo o para cocinar. Haciendo la cuenta de la vieja, hasta quince raciones. Quizás demasiado alimento para un solo día, y eso sin contar que algún caprichito siempre cae; porque a nadie le amarga un dulce, o un buen embutido, aunque solo sea como antojo.

Cuesta entender que este organismo recomiende la reducción del consumo de carne o leche por su impacto en el medioambiente; un análisis que, a priori, no parece competencia de una agencia de nutrición ni del perfil científico de los miembros de su comité. Un controvertido asunto que está lejos de resolverse en el debate científico, aunque en el político y social, parece que ya se ha dictado sentencia.