Tuvo gracia el zagal, el presidente de Murcia. Después de que en lo del PP Díaz Ayuso proclamara que su sitio está en Madrid, López Miras soltó: «Presidente, yo también me voy a quedar en Murcia». Ni siquiera ha ido Pinker a bailar. Aunque sí ... el padre Ángel. Qué buen discurso hizo Casado tras su victoria en las primarias. Entonces ganó a Soraya y Cospedal. Ahora Ayuso le deja creer que ha ganado confirmando que no aspira a un cargo por el que no se ha interesado. Se deja querer. Se deja creer.
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Hay una pintada con un retrato de Rita Barberá en uno de sus triunfos y el letrero: «El que no conoce a Dios a cualquier Ayuso le reza». El discurso de las primarias era el principio de algo. Si fuera a hacer todo lo que prometió en el de ayer, tendría que votarlo toda la derecha. Otra cosa es que se deje creer. De Sánchez dijo que «ya es pasado, aunque no lo sepa». A ver si tanto Sánchez como Casado son Bruce Willis y no saben que están muertos.
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