El PSOE redobla sus críticas a Garzón y UP habla de «deslealtad»

Le siguió el secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, que a su llegada a la primera reunión socialista del año del Comité Federal -la cual le ratificó como candidato a la Junta- ahondó en la tesis de la equivocación cometida por Garzón. «No se pueden sembrar dudas generalizando sobre un sector que es muy importante», ha afirmado.

El aragonés Javier Lambán, por su parte, ya cargó duramente contra el titular de Consumo por unas palabras que tildó de «insensatas» y «desgraciadas», sosteniendo que Garzón no podía seguir en su puesto «ni un minuto más». Y esta mañana se conoció que su Ejecutivo tiene previsto iniciar «en un breve plazo» una campaña para promocionar y poner en valor la ganadería aragonesa que se realizará en distintos medios de comunicación y comenzará en 'The Guardian', cabecera donde Garzón fue entrevistado y origen de la nueva polémica.

Otros líderes autonómicos, como Salvador Illa, han enfatizado en que las palabras de Garzón fueron a título personal. Un argumento con el que el propio secretario general de IU, que también incidió en la idea de que toda la polémica ha sido «un bulo intencionado» por parte de la derecha, ya ha tratado de desmontar al asegurar que sí hablaba como representante gubernamental. «No podría ser de otra manera tratándose de una materia que es competencia también del Ministerio de Consumo», aseveró.

Algo en lo que también han insistido en Unidas Podemos, a quien esta última grieta abierta en el seno del Ejecutivo de coalición ha llevado al portavoz parlamentario de los morados, Jauma Asens, a acusar a sus socios de una «deslealtad gravísima». «Nos han lanzado un chuletón a la cara», ha lamentado. Lo cierto es que varios de los episodios que más han podido avivar la tensión entre PSOE y UP desde la formación del Ejecutivo han contado con el protagonismo de un ministro de Consumo que revive hoy las críticas recibidas el pasado mes de julio, cuando ya recomendó reducir el consumo de carne por «perjudicar a la salud y al planeta». Desde el enfado que provocó en el turismo por aseverar que es un sector de bajo valor añadido, estacional y precario», hasta el tuit en el que acusó a Felipe VI de «maniobrar contra el Gobierno» tras una llamada del monarca al presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, por no poder acudir a la entrega de despachos de los nuevos jueces en Barcelona tras ser vetado por el Gobierno el pasado año.

Los dirigentes socialistas, al igual que los varones, rehusaron pronunciarse esta mañana sobre si Pedro Sánchez debía cesar a un ministro. No obstante, sí volvieron a desacreditar a su compañero de gabinete incidiendo en que el Gobierno tiene una única voz. La ministra de Defensa, Margarita Robles, recordó que lo «único» que compromete a un país son las decisiones que toma su Gobierno y pidió «cultura institucional» a Garzón, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, hizó hincapié en la defensa a ultranza que desde el PSOE se viene adoptando en esta polémica, asegurando que el sector ganadero en España está a la «vanguardia» por su «altísima calidad». La ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, también recordó que el Gobierno es «contundente» en el apoyo al sector ganadero de este país.