Imputados dos guardias civiles por la muerte de un narco en un choque en el Guadalquivir

Según los atestados remitidos al juzgado, que en principio abrió diligencias solo por un delito de narcotráfico, la 'goma' semirrígida de 12 metros en la que viajaba el fallecido (un hombre de 47 años y con múltiples antecedentes) y otras tres personas que fueron detenidas estaba fondeada en el río haciendo, 'petaqueo', o sea cargar bidones de gasolina para surtir de combustible a las lanchas rápidas que cruzan el estrecho cargadas de drogas o inmigrantes.

De acuerdo con la versión de los agentes, los tripulantes de la lancha de 'petaqueo' hicieron trataron de hacer una maniobra evasiva cuando se percataron de la llegada de la patrullera. Ese movimiento inesperado –afirman los funcionarios- fue el que precipitó la embestida mortal en la desembocadura del Guadalquivir. Basándose en ese primer atestado, el juzgado imputó a los tres supervivientes un delito de narcotráfico (la mera posesión de una lancha rápida ya está prohibida) y otro de homicidio imprudente por la muerte de su compañero.

Pero la familia del muerto denunció a los agentes por homicidio, en una querella que cayó en el mismo juzgado. La versión de los allegados del fallecido es muy diferente: la barca que hacía 'petaqueo' estaba al pairo; sus cuatro ocupantes estaban descansando en cubierta bajo un toldo aprovechando el sol del mediodía; y ninguno de los tripulantes arrancó el motor de la lancha.

La Fiscalía Antidroga ha pedido aplazar la citación de los dos agentes de la Guardia Civil como investigados el próximo mayo, a la espera de recibir los informes periciales de acusaciones y defensas de cómo ocurrió realmente el suceso.