Juan Cano
Jueves, 5 de febrero 2015, 11:27
El panorama económico de Isabel Pantoja se despeja un poco más. La cantante, que purga en la cárcel de Alcalá de Guadaira (Sevilla) una pena de dos años de prisión por blanquear dinero de Julián Muñoz, ha llegado a un acuerdo con Hacienda que le permitirá vender con más facilidad alguna de sus propiedades y, de este modo, hacer frente a sus deudas.
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Tras meses de negociaciones, el equipo de abogados y de asesores de la artista consiguió cerrar ayer un pacto con el fisco para repartir entre todos sus bienes el embargo provisional de 1.800.000 euros que pesa sobre ella por una posible infracción tributaria, según han confirmado sus representantes legales.
Hasta ahora, Hacienda tenía trabados todos los bienes de la tonadillera por la cantidad de 1.800.000 euros, de manera que, si vendía alguno de ellos, debía hacer frente al total de la deuda.
Con el acuerdo alcanzado el miércoles, la suma que le reclama el fisco se reparte entre todas sus propiedades del siguiente modo: la finca Cantora (Medina Sidonia, Cádiz) queda embargada por la cantidad de 1.000.000 euros; la casa de La Moraleja (Madrid), por 445.000 euros; y el resto, hasta llegar al 1.800.000 euros, sobre el piso y el local que posee en Sevilla.
Los abogados de la cantante confían en que, al ajustar la cifra de los embargos, se multiplican las posibilidades de venta de sus propiedades, ya que ahora, pese a las cargas que pesan sobre ellas, están mucho más cerca de su valor de mercado.
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